Pedraforca
Es el pico más alto de la demarcación de Barcelona con 2.506,4 m. Pero lo que le otorga el adjetivo de emblemático no es tanto la altura, que también, como su peculiar forma, una M gigante que escriben los dos picachos y la enforcadura. Asimismo, el hecho de no formar parte de ninguna cordillera, alzándose majestuoso y solitario en tierras del Berguedà, lo hace impactante y singular. Hay varios caminos para llegar a la cima, pero se requiere una cierta preparación física y unas cuantas horas de ascenso.
Los 4 del Montseny
Declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO, siempre es un placer adentrarse en los bosques del macizo del Montseny. Y también alcanzar la cima de alguno de sus gigantes. El Turó de l’Home, con sus 1.706 m, es el punto más alto, y si los que leéis estas líneas pertenecéis al club de los perezosos, sabed que podéis subir con vehículo motorizado hasta prácticamente la cima. El Matagalls y Les Agudes, casi tan altos como el Turó de l’Home, son una auténtica devoción para muchos excursionistas. Recomendamos también el Tagamanent, de poco más de 1.000 m de altura, con la iglesia de Santa María, de origen románico, en su cima.