1. Visitar Pollensa y su mercadillo
La localidad de Pollensa, en el extremo septentrional de la isla, bien merece una visita. Ubicada junto a la Serra de Tramuntana, cuenta con un sinfín de puntos de interés, desde sus playas a sus encantadores cafés, pasando por lo pintoresco de sus callejuelas. En las más céntricas se celebra todos los domingos, de 8 a 13.30 horas, un mercado con hasta 300 puestos con productos artesanales, joyería hecha a mano y artículos para llevarte a casa un producto auténticamente mallorquí.