¡5 motivos para (re)descubrir Figueres!

Si queréis hacer una escapada cercana y disfrutar de un destino repleto de cultura, patrimonio, rincones con encanto y buena comida, la capital del Alt Empordà os encantará
Panoràmica de Figueres
Iglésies
Time Out en colaboración con Turisme de Figueres
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Es uno de los puntos de peregrinaje imprescindible de los amantes del arte y, en especial, del surrealismo, ya que fue la ciudad donde nació y creció Salvador Dalí y donde, además, reposa el genio en la cripta de su Teatre-Museu. Pero, más allá de Dalí, Figueres es un destino magnífico para todo aquel que quiera descubrir museos bien curiosos y un montón de atracciones culturales y patrimoniales, pasear por calles y plazas llenas de encanto, disfrutar de una gastronomía y una tradición vinícola excepcional y desconectar en entornos naturales de gran belleza. Situada entre el Mediterráneo y los Pirineos es, además, un punto de partida ideal desde el que adentrarse por el paisaje del Alt Empordà, perfilado por la fuerza de la Tramuntana. Si tenéis días libres y queréis hacer una escapada sorprendente, ir será todo un acierto. ¡Os hacemos un avance de todo lo que podréis encontrar!

1. Museos singulares

Si pensamos en Figueres, pensamos en Dalí, en su arte y en su original Teatre-Museu, definido con su genialidad y donde se pueden contemplar sus primeras experiencias artísticas, piezas clave del surrealismo y las obras de sus últimos años. Además, en esta ciudad encontraréis otros museos únicos y para todos los gustos y edades, como el Museo del Empordà, que abraza una colección muy amplia de pinturas y esculturas de artistas como Sorolla, Blanquet o Santos Torroella. O el sorprendente Museo de la Técnica del Empordà, con una fascinante colección de máquinas de escribir. Y, tanto si vais con niños como si sois enamorados de los juegos de infancia, disfrutaréis mucho del Museo del Juguete de Catalunya, con más de 4.000 juguetes centenarios, como pelotas, aviones, coches, disfraces, robots, máquinas de vapor o patinetes.

2. Un castillo monumental

¿Viajamos atrás en el tiempo? Figueres es una ciudad con una historia fascinante y una de las mejores pruebas es su Castillo de Sant Ferran: la fortaleza más grande de toda Europa y el monumento más grande de Catalunya. Situada en la cima de una colina, en el castillo podréis aprender las características de esta gran construcción bélica y sus interesantes técnicas constructivas. Podéis consultar los horarios en la web del castillo y comenzar a planear una visita histórica.

3. La ciudad, a pie

En Figueres, la historia y el arte van de la mano y se pueden encontrar a pie de calle. Salpicada de plazas llenas de vida, con una Rambla emblemática, paseo central y punto de encuentro social por excelencia, una iglesia gótica imponente, la de Sant Pere, y con un montón de edificios elegantes de estilos como el barroco, el neoclasicismo, el modernismo, el novecentismo o el eclecticismo, es una ciudad que merece más de un paseo. Además, en sus calles se encuentran las casas natales de Salvador Dalí y de Narcís Monturiol, el otro hijo pródigo de la población, que ha pasado a la historia por inventar el primer submarino. Y es por eso que, durante los meses de julio y agosto, se llevan a cabo rutas culturales y paseos guiados que son una opción ideal para descubrir lugares emblemáticos y todos los secretos que se esconden al aire libre. Consultad los horarios en la web de la oficina de Turismo.

4. De compras

Los más ‘fashionistas’ ya saben que otra manera de descubrir las calles de una ciudad es saliendo de compras. Desde siempre, Figueres ha destacado por ser un centro comercial importante: fue la primera ciudad de Girona en tener una zona de peatones en su barrio antiguo y hoy en día se pueden encontrar largos ejes comerciales de moda, confección, alimentación y decoración. Perdeos entre las tiendas que llenan y rodean la plaza del Ayuntamiento, justo en el centro de la ciudad. Además, si queréis explorar a fondo los productos de proximidad típicos de la zona, los mercados de la plaza del Gra y de la plaza Catalunya son el lugar que buscáis: vino ecológico, aceite del Empordà y la conocida y dulce cebolla de Figueres. ¡Irresistible!

5. Rutas con gusto

Por las calles de la ciudad también encontraréis una oferta gastronómica de lo más variada: desde bares y terrazas para hacer un buen vermut hasta restaurantes de una calidad culinaria excelente. En muchos de estos restaurantes podréis saborear platos y productos típicos de la zona y de larga tradición. Además, las tierras que rodean Figueres destacan por su tradición vinícola: los vinos DO Empordà. Podréis disfrutar de diferentes itinerarios de enoturismo especializados en la historia del vino del Empordà. Sea cual sea vuestra preferencia, negros, blancos o rosados, la oferta que encontraréis será amplísima e ideal para maridar vuestras comidas de km0 con una buena copa de vino. ¡A brindar!

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