Arlequí Màscares (CERRADO)

La tradición catalana del papel cartón (gigantes, cabezudos, marionetas, caballitos de juguete, figuras del bestiario como los dragones y otras 'patums') es la esencia de este negocio que trabaja la máscara: desde la tragedia griega hasta la 'Comedia dell'Arte', pasando por la tradición francesa, el teatro catalán popular (Dentat, Cap d'Ou, Dimoni) o el' Noh 'japonés. Una variedad que se completa con las creaciones de Jaume Serra y Samira Badran que, tras hacer Bellas Artes en Italia, montaron Arlequín Máscaras en el Pueblo Español de Montjuïc en 1982. Su patrimonio: unos 300 modelos de máscaras que permiten ser seriadas sin perder el carácter artesanal. Turistas, coleccionistas, actividades teatrales y festivas son la clientela de la tienda de la calle Princesa donde, además de caretas, se pueden encontrar muchos otros objetos de papel cartón. Curiosamente, las máscaras están de moda en las bodas. Y es que, como en todo, hay tendencias. La última es la 'catrina'. La calavera -irreverente y ácida- creada en 1910 por el grabador, ilustrador y caricaturista mexicano José Guadalupe Posada, y bautizada así por el artista Diego Rivera, nos recuerda que la vida es un Carnaval.