Se abre el telón y aparecen un alemán, un francés, un danés, un belga y un español. Parece un chiste y es eso y muchísimo más. Así empieza una de las flipadas teatrales más gratificantes que ahora mismo ocupan uno de los escenarios de la ciudad. En la Sala Petita del TNC se ha instalado 'Europa Bull', el último proyecto de Indi Gest y Jordi Oriol. Premi Quim Masó 2018 y una fantasía política desatada que corroe los mitos fundacionales de Europa, desde el rapto de la ninfa a la virgen mártir, pasando por las revoluciones burguesas; para levantar con sus escombros una cáustica e hilarante farsa. Episodios europeos convertidos en descomunal y brutal sátira.
Es difícil enumerar todas sus brillantes ideas, pero la incansable, acerada e indiscriminada burla que despliega Oriol como autor y director evoca sin remedio a una manera de entender el teatro que parecía que nadie se atrevía a reivindicar desde hace tres décadas: el de Els Joglars de 'Virtuosos de Fontainebleau'. Felicísima recuperación que además se mueve en una cuidada escenografía de Max Glaenzel que respira la ironía funcionarial de Marthaler, y un elenco con todos los talentos posibles, aplicados a un juego de disfraces físicamente agotador por la multiplicación de personajes y acciones.
Autoría y dirección: Jordi Oriol. Con: Anna Hierro, Joan Carreras y Carles Pedragosa.