A Pol López, la Puigserver le va bien. En 'Crim i càstig' hizo un Raskólnikov de primera, un hombre perdido por sus actos. Y ahora, en 'El misantrop', encarna a un Alceste que no se encuentra muy lejos del protagonista de Dostoyevsky, un personaje que confía poco en la humanidad, terco, idealista, al que se le ha acabado su tiempo. A su lado tiene a Mireia Aixalà (Célimène), la esposa, que sabe jugar sus cartas y un Norbert Martínez (Philinte), el amigo, que sabe lo que se hace. El problema es que la propuesta de David Selvas no acaba de funcionar.
En 'El misántropo', Molière quiso retratar la hipocresía de la nobleza de su siglo, en el XVIII, a través de un personaje que no sabemos si compadecer o si hace gracia. Selvas sitúa la acción en una discográfica donde Alceste es el fundador e ideólogo y su mujer, Célimène, su ayudante e impulsora de un festival. El resto de personajes, de una u otra forma, trabajan para Alceste, es decir, están en el negocio de la música. Como en la obra original, la acción transcurre durante un día, pero lo que ocurre en el Lliure tiene poco que ver.
Molière hace que Oronte le demuestre su talento a Alceste con un soneto, que en Lliure se transforma en una canción urbana
Sergi Pompermayer firma la dramaturgia y Pablo Macho Otero tiene el mérito de haber rimado el nuevo texto. Flirtean con el original: Molière hace que Oronte le demuestre su talento a Alceste con un soneto, que en el Lliure se transforma en una canción urbana. Más allá de esto, pocos puntos de conexión. En el original, por ejemplo, Alceste y Célimène no están casados y ella tiene al menos cuatro amantes, uno de los cuales es el protagonista, con quien juega todo el rato. Selvas convierte su relación en algo mucho más conservador.
Selvas, además, coloca una banda sonora bastante extraña: ¿pueden convivir en una misma obra el 'Human nature' de Michael Jackson y el 'Sufre como yo' de Albert Pla? El problema principal de todo ello es que la función tiene poca verosimilitud. Y el juego metateatral con el que arranca no ayuda mucho. ¿De qué nos están hablando?, nos preguntamos. ¿De creer en unos ideales y no desfallecer? ¿De la fidelidad? ¿De la confianza? ¿Del ego de los artistas?
No te pierdas la lista de las obras recomendadas que hay en la cartelera ahora mismo.