Autor: Ever Blanchet. Dirección: Oscar Molina. Con: Rosa Cadafalch, Maria Clausó, Pep Ferrer, Ferran Lahoz.
Cuando se trae a colación el término 'generacional' la primera imagen es la de un producto dirigido a un segmento de la sociedad entre los 20 y los 40 años. El público idóneo para crear vínculos de consumo ligados a una etiqueta. No siempre es así. Quienes inauguraron esta mercantilización de la fecha de nacimiento fueron los 'baby boomers', los nacidos entre 1946 y 1964, reemplazados por la Generación X y los Milennials. 'Amics íntims' de Ever Blanchet es una comedia con suaves ribetes dramáticos protagonizada por cuatro 'baby boomers' (dos matrimonios con fuertes lazos de amistad) concentrados en lidiar con los crecientes achaques, físicos y emocionales, de la madurez. Profesionales solventes, seres humanos imperfectos, que barajan un retiro en común.
Òscar Molina dirige con cierto estilo afrancesado una obra que tiene el sexo y sus derivadas como motor dramático. Aunque algo descubrimos sobre otros aspectos de su vida, la comedia se explaya prolijamente sobre las fantasías, gatillazos, deseos y frustraciones de hombres y mujeres instalados en la cincuentena. Observamos entretenidos las diferencias respecto a cómo cada uno afronta los cambios en su libido; batalla personal ganada en este texto por la serenidad y libertad de miras de las mujeres.
Los cuatro intérpretes (Rosa Cadafalch, Maria Clausó, Pep Ferrer y Ferran Lahoz) se esfuerzan por aportar naturalidad a una puesta en escena correcta, con buen ritmo, con los matices justos señalados por el director y el autor. Quizá Lahoz sobresalga entre sus compañeros por su sincera composición de una personalidad apática, arrollado por una no deseada –aunque bien pagada– prejubilación.