Los adivinos no conocen el futuro. Sus predicciones son simplemente, o no tanto simplemente, recuerdos de vidas anteriores. ¿Seremos capaces, pues, de cambiar lo que parece escrito? Esto es lo que quiere averiguar el doctor Görtler, un profesor alemán que se planta en un idílico hotel rural de la vieja Inglaterra haciendo extrañas preguntas sobre los huéspedes que tienen que llegar o los que ya están. Görtler es el motor de esta enigmática historia que abunda en el misterio del tiempo y al que da vida un soberbio Carles Martínez en una de sus mejores interpretaciones. Su inquietante presencia, su inquisitorial interrogatorio y las teorías perturban a los huéspedes y a la hostelera sin que sepan muy bien el por qué.
El enigma envuelve esta obra de JB Priestley que forma parte de su trilogía del tiempo y que cuestiona el concepto de la temporalidad lineal en favor de la teoría de Ouspensky de recurrencia eterna según la cual todo el mundo vive su vida una y otra vez con pequeños cambios. Un teatro de ideas de ambición filosófica que abunda en una temática que le es muy cercana a Sergi Belbel, que ya había tocado la cuestión en obras como 'El temps de Planck' y 'A la Toscana'.
Sobre una arquitectura dramática de corte muy clásico y de indudable eficacia, el mejor Belbel levanta una función tan precisa en el ritmo, los movimientos y las intenciones como en el magnifico, por creíble y sentida, trabajo de Lluís Soler, Míriam Alamany, Sílvia Bel, Jordi Banacolocha, Roc Esquius y el citado Martínez en un idóneo espacio escénico de Max Glaenzel.
Autor: J.B. Priestley. Dirección: Sergi Belbel. Con: Míriam Alamany, Jordi Banacolocha, Sílvia Bel, Roc Esquius, Carlos Martínez y Lluís Soler.