De Jorge Picó y Sergi López. Dirección e interpretación: Sergi López y Jorge Picó
Una puntuación de tenis y el nombre del gran explorador escocés intitulan un espectáculo que, sin embargo, tiene poco que ver con el deporte y con las expediciones africanas más allá de erigirse en recurso dramatúrgico para una fantasía cómica con la que Sergi López vuelve a demostrar su espléndido dominio del gesto y del juego escénico, esta vez acompañado por quien dirigió el magnífico e hilarante 'Non solum' y ahora codirige con López esta nueva aventura.
El resumen de estos divertidos 90 minutos es al fin una paradoja de la juventud que rehuye las reglas, la vida cuadriculada y marcha en busca de un animal extraordinario, el señor Ciervo, pero que acabará imitando aquellas actitudes y maneras de pensar que tanto rechazaba en sus ancestros desde la mismo sillón de orejas de su padre.
Un frágil nudo dramático para un monólogo de dos, el señor Ciervo se mueve, y cómo, pero no habla, lleno de gags gestuales y faciales sobre un propósito de texto que como algunas de las acciones se repiten y rompen el buen ritmo de una función muy bien iluminada en un espacio escénico singular. Salvo este inconvenientes Sergi López y Jorge Picó componen un espectáculo de tonos surrealistas que logra el objetivo.