Deja atrás la vergüenza, desengrasa la imaginación y lleva a la práctica estas propuestas estimulantes para parejas, solteros y grupos. Descubrirás conceptos y prácticas que harán que tu vida sexual sea más movida, lugares donde hacer volar la imaginación y también cultura sobre el amor y el sexo. ¡Buen provecho!
NO TE LO PIERDAS: Restaurantes románticos de Barcelona.
Una fácil, va: daos un beso con lengua en el Carrer dels Petons, en el Born.
Juanjo, del Caribbean Club, es un experto en diseñar cócteles al momento según vuestras preferencias. Pedidle que os prepare uno afrodisíaco...
Bienvenidos al descubrimiento de vosotros mismos y de vuestros compañeros a través de la mirada, el abrazo, el tacto consciente.
www.adas-aurea.com. A partir de 75 € por pareja
Cuando os quitéis la ropa y vuestros amantes vean que lleváis puesto un butt plug, no tendrán ninguna duda de que queréis marcha. Y si además tiene una joya, ¡los dejará deslumbrados!
Dedicad un momento al día a escribir vuestras experiencias. ¡Os sorprenderéis y aprenderéis!
Blandito y discreto, un buen complemento para ellos. Podéis conseguir un Tenga Egg por 9,99 euros.
Si hay un clásico de los por horas en la ciudad este es, sin duda, el mítico La Paloma, una opción céntrica y económica perfecta para los calentones de la mañana, mediodía, tarde y noche. ¡Ellos mismos dicen que sus habitaciones son "nidos de amor"!
¡La curiosidad y la confianza son la base del mejor sexo!
Después del famoso vibrador con conejito, que hizo las delicias de Carrie Bradshaw en 'Sexo en Nueva York', llega el pájaro carpintero: un vibrador con un pájaro dispuesto a picotear todo lo que se le ponga por delante. Hay varios diseños y tamaños y su principal gracia es que no sólo vibra, sino que mueve el pico arriba y abajo.
Si sois amantes de las experiencias fuertes y la cultura japonesa, preparad cuerdas y un buen tatami porque estáis de suerte. El shibari es la versión nipona del bondage, el arte de atar personas durante un encuentro sexual. En NoShibari encontraréis cursos, clases temáticas y sesiones privadas para que os introduzcan en esta disciplina.
En este hotel se han propuesto que este San Valentín el deseo despegue hasta las cotas más altas y ofrecen sus suites con una de las mejores vistas de la ciudad a las parejas más intrépidas.
Este es el título del escape room erótico que proponen en Komnata. ¡No querréis salir!
Bocas, dedos, pies, orejas... Intenta tener sexo sin centrarte en los genitales.
Los parkings de Diagonal Mar y de la estación del Prat pueden servir de escenario para un encuentro con el encanto de lo furtivo.
Una muy buena opción para decir lo que no os atreveríais a decir al natural es el 'sexting': mensajes y correos subidos de tono y 100% confidenciales.
Buscar una cita por unas horas no está reñido con el buen gusto: en este hotel podréis disfrutar del interiorismo sobrio y elegante de un edificio del siglo XIX en plena Gran Vía. Consultad sus paquetes por horas.
Parecen lubricantes, pero son mucho más. Aplicados en el clítoris generan una sensación íntima chispeante y progresiva. Probad el Stimul8.
Y no es que nos hayamos equivocado. Uno de los clubes liberales de intercambio de parejas más populares (y selectos) de la ciudad nos recuerda la parte aeróbica del tema.
Todo el mundo sabe que la capital alemana es una de las ciudades punteras en diversidad sexual y no es gratuito que el nombre de este local le rinda homenaje. El Berlin Dark es el templo del sado para hombres en Barcelona y estarán encantados de hacéroslo pasar muy, muy mal.
Tranquilos, no os dejéis guiar por el nombre porque no os encontraréis a vuestros conocidos más 'hipsters'. El Moderno es una opción bolsillo 'friendly' justo detrás del Liceu.
En El Petit Jardí (Condal, 26) tienen los lilium orientales más olorosos y sensuales del Gòtic.
Si os gustaban los vibradores con perlitas que giraban, el Warren (89,99 euros) será vuestra perdición. El sistema rolling hace que no todas las bolitas del interior del vibrador se muevan a la vez, por lo que la experiencia es de sorpresa total.
El restaurante Cinc Sentits, conducido por el chef Jordi Artal, es una auténtica experiencia organoléptica. Probad sus aceitunas líquidas, ¡no os arrepentiréis!
Lo dijo Lucrecia y nosotros no somos nadie para contradecirla: una de las comidas más sabrosas del mundo son los besos de chocolate. Los bombones en forma de labios que hacen en la pastelería Escribà son un regalo rojo y carnoso para los sentidos.
El Mirablau es siempre una buena opción si lo que buscáis es alimentar la vista y el estómago.
Los juguetes están bien, pero a veces es bueno el contacto piel con piel. ¡Los mini-vibradores removerán vuestros dedos para que hagan maravillas!
Seguro que conoces el Museo de la Erótica por la Marilyn que, día sí día también, saluda a los transeúntes de la Rambla con la falda en pleno vuelo. Lo que proponemos, sin embargo, es entrar: ¿sabíais que disponen de una colección de arte erótico japonés bastante interesante? Siempre es bueno aprender de otras culturas.
Probad, aunque sea por una noche, daros placer con el o la 'partner' sólo con las manos. Así os aseguráis que os entendéis, de que sabéis lo que queréis y, seguramente, aprenderéis cosas del otro y de vosotros mismos.
Una copa de cava en la terraza del Gran Hotel La Florida, en lo alto de la ciudad, es el preludio perfecto para una noche de pasión desenfrenada.
Rampas, plataformas, escaleras, chaise longues; y también lavadoras, sofás, ducha... Decid adiós a la cama.
Los estimuladores de clítoris ya no son una moda, sino que casi se han convertido en producto de primera necesidad. La gran novedad en este campo son los succionadores, con ondas sónicas, que profesan amables chupitos en la zona más sensible del cuerpo femenino. ¿Un ejemplo? El Sona Cruise de Lelo.
Blandas, acuosas, con un punto de limón o picante... No es un secreto para nadie que las ostras son las reinas de la comida afrodisíaca, vayan con perla o sin. Las que hacen en el Mediamanga, un pequeño restaurante situado en medio del Eixample, están hechas nada menos que a la carbonara. ¡Arremangaos y a disfrutar!
Si estáis hartos de tener que respirar hondo antes de entrar en un sex-shop, Amantis es vuestro sitio. Más allá de ser un local bien decorado y luminoso, con complementos y juguetes, hay un discurso propio, preocupado por una sexualidad saludable y con conferencias y formaciones.
El grupo de restauración Teresa Carles, con restaurantes y una tienda de zumos, se ha convertido en uno de los 'must' de la ciudad, tanto para vegetarianos como para el resto. Lo que no todos saben es que la Selva Negra que sirven en el local del Raval es una auténtica perdición para los amantes del chocolate más lujurioso.
Y no, ya os podéis imaginar que esto no va de bailar. El 'swinging' o el intercambio de parejas es una muy buena opción para huir de la monotonía, para experimentar cosas nuevas y dejarse llevar por la curiosidad. Si deseáis probarlo en un lugar muy elegante, el Oops es vuestro espacio.
Si modificamos nuestros cuerpos para casi todo, ¿por qué no en el ámbito sexual? Las fundas para pene son una buena idea para aquellos que quieran experimentar con el tamaño, la forma y la textura. Por unos 25 € euros tendréis la Get Lock.
No es una invocación blasfema, sino una marca de aceites estimulantes inspirados en el cannabis. ¡Cuando lo verde no es sólo por los chistes!
Una manera original de potenciar la intimidad es cambiarse el nombre, o poneros uno que solo conozcáis vosotros. Nadie más podrá descifrar el código.
Parece increíble pero el 'squirting', el arte de las chicas para dejarlo todo salpicado, también se puede aprender. Seguid la pista de la 'trainer' Anahí Canela y no os perdáis ni gota.
Montjuïc, el Parque de la Oreneta y el parque de Joan Miró son algunos de los sitios de 'cruising' más habituales.
Ya hace varios años que un grupo de hombres se encuentran cada domingo para tener una sesión de sexo seguro y desenfadado.
Si os gusta el minimalismo y queréis que invada todos los espacios de vuestra vida, estáis de suerte. La exclusiva marca erótica Lelo propone la línea de condones Hex, con motivos geométricos y altamente ergonómicos.
Pensados para que los utilicen dos chicas al mismo tiempo, es la nueva versión del consolador de dos cabezas. Podéis conseguir un Kirk por unos 69,99 euros.
No queremos parecer carcas, pero cuando supimos de su existencia pensamos que todo está inventado. Pero líquidos como el Plus Amour (19,99 euros) os llenarán la piel de hormigueos y escalofríos.
Esto último no os lo explicaremos sino que tendréis que imaginar... Un punto clave de las buenas relaciones sexuales son el placer mutuo y la reciprocidad. ¡Generosidad al poder!
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