Decálogo para ligar en la ciudad

Ser pillo, afectuoso o inteligente no es ninguna garantía. Hay estrategia: momento justo, lugar adecuado y ser tú mismo. El resto son cuentos de hadas. Te han dicho que si eres pijo es raro que lo intentes con hippies, o que si eres gótico es más fácil con góticas? Mienten: somos totalmente caprichosos. Ignoro expresamente si buscas hombres o mujeres: en el siglo XXI se liga con personas, esta es la gracia del invento. Llamaremos al interfecto o interfecta con un genérico 'conejito', con respeto, estamos jugando. Busca los que te atraen, por donde se mueven, para no malgastar tiempo y energía. Las estrategias primarias fallan, los humanos básicamente nos tocamos interruptores, proactivamente, y hay que tocar también neuronas, por ejemplo (y sobre todo) comunicándose. Si no te interesa lo que piensa el otro será como hacerte una paja mental. Puede provocar placer, pero es muy solitario, que quede claro. Haz algo nuevo cada semana. Ve donde nunca hayas estado, puedes ligar más que otros veranos haciendo cosas diferentes, y si no te lo crees... Pruébalo, que es divertido y no pierdes nada. Es más, imponte ir a los sitios que te parezcan más absurdos: quizá precisamente allí te está esperando el conejito bombón que siempre había soñado. No te permitas el lujo de no dignarte a hablar con alguien que no es espectacular, da la oportunidad que te gustaría recibir, no encontrarás a nadie perfecto: tu tampoco lo eres. Mentalización: ¿quieres ligar o qué? Que líos que tenemos en la cabeza... cambia el chip: hasta que una persona no se dé el permiso, no lo conseguirá. Sal sin distracciones. Nada de ir con una amiga explosiva o un amigo que se las lleve a todas. Date margen, que te descubra alguien por ti mismo y... ¡se quede contigo! Y sobre todo: recuerda que el objetivo es pasárselo bien. Ligues o no, si te has divertido ya habrá valido la pena. Y vosotros, ¿cómo ligáis? ¿Cuáles son vuestras tácticas infalibles? Podéis explicarlas en los comentarios de abajo.