Es apropiado que unos baños que recuperan la tradición de las termas esté situado en un antiguo enclave romano. A 30 kilómetros de Barcelona y en una masía del 1497, Aire de Vallromanes, la sede más rural del Grupo Aire -en Barcelona están en el Born– ofrece en una elegante atmósfera de tranquilidad con luz natural –del exterior y de velas– la experiencia relajante del contraste térmico que tanto gustaba en las culturas clásicas y árabes: baño de vapor (hammam), baño templado (Tepidarium, 36ºC), caliente (Caldarium, 40ºC) y frío (Frigidarium, 16ºC), además de hidromasaje, piscina al aire libre con vistas a la naturaleza y flotación en un baño de agua salada.
La experiencia puede completarse con tratamientos (a partir de 46 euros), entre ellos un baño de vino y uno con productos de la casa de alta cosmética natural ecológica catalana Alqvimia (la Experiencia Solsticio, exfoliante, relajante y revitalizante con aromas cítricos), y estancias con que incluyen comidas y pernoctación.