Poca broma con Txapela, que hace ya un cuarto de siglo que se estableció como barra de 'pintxos' en el centro Barcelona (algo que la convierte en casi decana de la materia). Un punto de encuentro perfecto para tomarse unos zuritos, una sidra o un Txacolí bien frío y acompañarlo con unos pinchos. En esta taberna vasca se pueden degustar recetas de siempre y otras tan originales como el rollo de cecina y parmesano con pistachos o el pincho de camembert semi-fundido con manzana caramelizada y miel trufada.
Y van más allá del pincho: han incorporado un apartado donde se entrecruzan el País Vasco, Cataluña y las tapas en general: recetas como una fideuá de callos con rebozuelos (¡un plato que ya sabes que funcionará con solo oírlo!). O unos calamares a la andaluza con mayonesa de 'piparras' de Ibarra. Y si eres más clásico, te recomendamos el solomillo de vaca a la plancha, cortado bien fino y acompañado de piquillos confitados o las brochetas de pollo con salsa BBQ a la vasca.