Si el viernes noche fuera un sitio, sería Tracatrá: tapas, música en directo y mucha fiesta en el único restaurante de Barcelona dedicado a la rumba catalana. Una vez entras, la música que se oía desde fuera te atrapa por completo y los ojos se nos van al tablao, en medio del local, con su cajón, guitarra y bailadores. Aquí es donde ocurre la mayoría de la magia del Tracatrá con sus espectáculos de flamenco y rumba catalana, pero no es el único espacio mágico del restaurante. La propuesta culinaria del chef David Barba también hechiza, con su cocina abierta y visible desde la barra.
Desde el jamón 5 jotas cortado al momento hasta el pulpo a la gallega con patatas confitadas, pasando por su oferta de carne y marisco, el menú de Tracatrá es extenso y diverso. Uno de sus platos estrella es la bomba con rabo de toro, pero su meloso de ternera no tiene nada que envidiarle. En cuanto al postre, no podréis iros sin haber probado tarta de queso (a pedir entre dos, ¡creednos!).
Pero el verdadero plato fuerte del restaurante rumbero no es ninguna tapa, ¡es la fiesta! Del Tracatrá no uno quiere marcharse, bien sea un sábado con mucha juerga o un martes más tranquilo e íntimo; apto para cenas románticas en pareja y noches de desfase con los amigos. Un espacio versátil y con mucho encanto que os dejará con ganas de repetir.