W Barcelona
Foto: W Barcelona
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3 razones para sentarse frente al mar y saborear el restaurante FIRE del W Barcelona

El restaurante del hotel que inicia el skyline de la ciudad ofrece una propuesta culinaria que es una mezcla de fuego, sabor y productos de temporada. Si este otoño queréis sorprender con un planazo, su menú gourmet será todo un éxito

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Cuando bajan las temperaturas, hay que buscar 'hot spots' que nos alejen del frío y en Barcelona estos rincones tienen nombre propio: el restaurante FIRE de W Barcelona. Su nombre no lo puede decir más claro, es un espacio con un ambiente que arde y una localización perfecta donde además de disfrutar de vistas, una decoración increíble y un escenario ideal para encuentros, también saborearéis una oferta gastronómica de comida top. ¡Su clave es la parrilla! Estas semanas de otoño en las que ya estamos pensando en nuestras reuniones familiares o comidas de empresa, ¿qué tal si le dais un toque de fuego a estas citas? Con un menú gourmet al que no le falta de nada, degustaréis una atrevida fusión de sabores inesperados con platos que combinan toques de toda la vida y detalles vanguardistas. En la cocina de FIRE se desafían los sentidos para que cada uno de sus comensales cree su propia fiesta gustativa en el paladar. Aprovechad la recta final del año para descubrir este espacio especialmente diseñado para que los contrastes resalten y reservad mesa para una experiencia culinaria que arderá por siempre en vuestra boca. Lo podéis hacer en el correo FIRE.WBARCELONA@WHOTELS.COM, os contamos más.

1. Un menú gourmet para este otoño

Se acaba el año y llegan las reuniones, esas que el año pasado nos costó tanto hacer. Encuentros con amigos que hace mucho que no vemos, comidas de empresa para cerrar el curso, momentos familiares alrededor de la mesa y planes románticos para celebrar el amor. Saber escoger con qué vamos a acompañar todos estos instantes puede hacer que un plan vaya bien o vaya mal, y con el menú gourmet de FIRE os aseguramos que no habrá errores. Es un menú de lo más completo que podréis maridar con vinos blancos, tintos y cava, y platos tan exclusivos como chuletón de rubia gallega madurado. ¡Porque las ocasiones especiales se tienen que celebrar! También encontraréis pequeños placeres como puerro con romesco de nueces y pistacho, pasando por un tartar de lujo de solomillo de vaca de Girona y pan sardo. Una delicia. Con toques cítricos que os atraparán, podréis degustar un centollo de pomelo, limón quemado y chips de patata violeta: una explosión de colores. Y mucho mar, como el calamar fresco a la parrilla con pimientos de Padrón y frito de alioli, o un pez espada a la brasa con puré de patata ahumado, espárragos, mojo verde y sorbete de yuzu. Una comida como esta no se podría terminar sin su toque más goloso: una tarta tatín de manzana con helado de vainilla y crema inglesa.  Os chuparéis los dedos. En el maridaje, os esperan Fenomenal, Verdejo y Rueda como vinos blancos, los tintos Marqués de Arienzo, Tempranillo y Rioja como tintos, y Torelló Gran Reserva para brindar con cava.

2. Insignias de la carta

Stefano Pinna es el chef de FIRE y sus creaciones, ya las saborearéis, son creativas e innovadoras, mezclan ingredientes que no sabíais que necesitabais en un mismo plato y se caracterizan por su variedad de colores. En la cocina de FIRE solamente entran productos de calidad y de temporada, siempre cocinados mezclando técnicas de cocinado vintage y actuales, y poniendo cara a cara las elaboraciones más complejas con aquellas simples, y de toda la vida, a la parrilla. Antes o después de degustar el menú que os proponen, tenéis que probar sus cócteles insignia, todos con nombres que dan un guiño al nombre de restaurante. Como el ardiente Lava, con vodka, zumo de tomate, puré de pimiento rojo, salsa de kimchee y lima; o el potente Carbón, con ginebra, licor de jengibre, lima, sirope lapsano y clara de huevo.

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3. Una atmósfera excitante

No vamos a deciros todo lo que ya sabéis, es decir, la ubicación privilegiada de W Barcelona, junto a las olas que chocan contra la ciudad y la montaña de Montjuïc de fondo. Tampoco os vamos a hablar de lo bonito y diferente que es contemplar el paisaje de la ciudad desde este rincón, ahora que es otoño y las hojas han teñido la ciudad de tonos cálidos. De lo que os vamos a hablar es del ambiente y la atmósfera del restaurante FIRE: un espacio perfecto para pasarlo bien, saborear comida real y conectar con tus acompañantes. Todo, a través del fuego como elemento principal. Y es que FIRE nace de la necesidad del ser humano por socializarse, de las chispas que llaman la atención, de esas llamas que te atraen y de esa energía que te fascina y te hace querer más. Porque después de degustar FIRE, no lo podréis quitar de vuestros restaurantes favoritos.

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