Comer en El Celler de Can Roca es un lujo extraordinario que la mayoría de la gente sólo puede permitirse unas pocas veces en la vida. Así pues, el restaurante Normal, abierto en verano de 2021, parte de la base obvia de que el personal pueda comer con más frecuencia, con un ticket de entre 50 y 70 euros. Como dicen los hermanos Roca, si el Celler es orfebrería, Normal es artesanía. Al frente de Normal está Eli Nolla, quien fue uno de los jefes del Celler de Can Roca. El nombre es de lo más humilde, sobre todo si tenemos en cuenta que este es uno de los mejores restaurantes de Girona.
La fórmula no es otra que buscar la excelencia en platos de intenciones más terrenales que los de la casa madre, pero también llenos de técnica y guiños tanto en la cocina clásica francesa como en el producto de proximidad. Es decir, "la tradición combinada con la minuciosidad de la academia", dice Josep Roca. La estructura de la carta de Normal es de lo más ídem –entrantes, carnes, pescados, postres– pero lo que no lo es tanto es la ejecución de platos como un pichón a la brasa, milhojas de tupinambo y setas en escabeche con castañas, o unas croquetas de jamón ibérico y leche de oveja de proximidad, platos que no recurren a producto muy caro –al contrario de lo que suele ocurrir en las Michelin– pero que lo elevan a base de técnica y creatividad.