También es un valor añadido el inmueble: el restaurante ocupa una casa entera de Major de Sarrià, una finca catalogada del s. XIX donde los comedores se asimilan a las habitaciones y que evita aquel gran riesgo de los restaurantes de gama media-alta, la de caer en el interiorismo de postín pero impersonal. En la barra, el 'sushiman' cocina en directo y en el reservado del restaurante podréis comer, tras cortinas japonesas, junto a la antigua chimenea de la mansión. La gran sorpresa la encontramos en el sótano: la antigua bodega se ha convertido en un espacio íntimo -que se puede reservar entero para grupos- que todavía mantiene un túnel subterráneo de la Guerra Civil que conecta la casa con la iglesia de Sarrià.
Time Out dice
También es un valor añadido el inmueble: el restaurante ocupa una casa entera de Major de Sarrià, una finca catalogada del s. XIX donde los comedores se asimilan a las habitaciones y que evita aquel gran riesgo de los restaurantes de gama media-alta, la de caer en el interiorismo de postín pero impersonal. En la barra, el 'sushiman' cocina en directo y en el reservado del restaurante podréis comer, tras cortinas japonesas, junto a la antigua chimenea de la mansión. La gran sorpresa la encontramos en el sótano: la antigua bodega se ha convertido en un espacio íntimo -que se puede reservar entero para grupos- que todavía mantiene un túnel subterráneo de la Guerra Civil que conecta la casa con la iglesia de Sarrià.
Detalles
Discover Time Out original video