El restaurante de este espacio patrimonial tan emblemático está a la altura de las circunstancias: La Cuina del Moja es un local de 'slow food' de tradición mediterránea. La conceptualización de la carta ha sido elaborada por el chef Xavier Pellicer y el interiorismo evoca la atmósfera relajada y agradable propia de una casa de payés catalana.
Cada mañana, el cliente puede disfrutar de un buffet libre para el desayuno, con bollería, bocadillos y zumos naturales. Al mediodía, se encontrará un menú muy completo o podrá comer a la carta, con platos tradicionales de la cocina catalana, como por ejemplo bacalao a la llauna, fricandó o albóndigas con sepia, y también pescado fresco y arroces. Siguiendo la filosofía 'slow food', carne, pescado y vegetales son de proximidad, y ecológicos en la medida de lo posible.