La mascota es un panda y se llama Jaime. Su silueta dibujada con neones rojos te llamará la atención desde el exterior, aunque nunca podrías adivinar que se esconde detrás de la puerta de este restaurante situado en pleno Eixample de Barcelona. Un paso hacia el interior de Gutai te transportará de hacia Tokio, pero también a Moscú, a nuestra Barcelona, a Seúl y a Bangkok. ¿Todo a la vez? ¿Cómo puede ser? Gutai es ecléctico, huye de los clichés y ha llegado desde la capital rusa para remover la cocina asiática con un estilo muy diferente y un servicio muy profesional y amable. Con una estética industrial y rústica que juega con los espejos y las alturas, los detalles de este restaurante bailan entre el mundo asiático y el Occidente. Una mezcla que te enamorará y que no sólo se huele en las apariencias, sino sobre todo en sus deliciosos platos y cócteles únicos.
Una pequeña sala recibe a todos aquellos que quieran hacer unas tapas. También hay lugar para los que quieran tomar una copa en la zona del pub y elegir cualquiera de la larguísima carta de cócteles de autor. Y aún hay más: iluminado con una tenue y cálida luz, un estrecho pasillo pasa por delante de una cocina abierta. Nos hace viajar de repente a los callejones de Japón o de China, llenos de pequeños tenderetes de comida callejera. De los woks que humean nos viene el aroma de las delicias que versionan platos asiáticos al estilo único del Gutai. Y al fondo, una sala con una estética más tradicional, y con un tatami dibujado en el suelo, ofrece el lugar perfecto para disfrutar de la privacidad del ambiente tranquilo y de una buena comida o cena.
Gutai te fascinará, por eso te contamos más detalles: ¡porque no queremos que te pierdas un lugar como este!
