Cuatro generaciones han pasado por los fogones de Ca l'Enric desde 1882. 120 años después, en 2002, la prestigiosa Guía Michelin reconocía el trabajo realizado por esta saga a la hora de actualizar la cocina que desde siempre había servido en su casa. Los responsables de este cambio son los jóvenes hermanos Juncà. Ellos tres hacen lo que llaman cocina de producto. Revindican el paisaje y el entorno en que se ubica el restaurante. En plena Garrotxa, dicen que su cocina es más de bosques que de volcanes.
Reindican el paisaje y el entorno en el que se ubica el restaurante. En plena Garrotxa, dicen que su cocina es más bosques que volcanes. Uno de sus menús, Descubrir el valle, juega precisamente con estos ingredientes más autóctonos: setas, trufa, carne de caza, anguilas, tortilla de río, cama-secos, rebozuelos, etc, con platos como la codorniz con esferificación de maíz y tostadita de su salmiso, una salsa hecha con los interiores del pájaro, foie y coñac.