Nos gusta mucho: la feria de Vino y Gastronomía de Santa Catalina -que comenzó como una alocada y voluntariosa feria de degustación de barrio- ha acabado convirtiéndose en una de las ferias de producto de proximidad más populares y atractivas de la ciudad. Este año celebra su décima edición.
Se hacen dos al año: la primera por los alrededores de mayo y la segunda, en noviembre, en las cercanías de Santa Catalina, la patrona del barrio. El lema de la feria es sencillo y esclarecedor: 'Mercado de mercados "made in barrio". En síntesis: los restaurantes de Santa Caterina salen a la calle y ofrecen tapas, pinchos y platillos y las bodegas dan copas de vino a buen precio, en medio de un ambiente vecinal y festivo, hasta las diez de la noche.