Cada vez son más las lamentaciones por falta de un enfoque nutritivo mas sano en la oferta de los restaurantes de nuestra ciudad. Sobretodo por las mujeres, que prestan más atención a este tema.
El Mandarina se ha convertido, por el contrario, en un punto de referencia de comida sana, sencilla y sin pretensiones en la zona de Sarrià. Desde que Ariadna y Jordi decidieron hace unos años abrir solo a la hora de almuerzo y comida, parece que se han centrado en mejorar la oferta culinaria, dando un toque más práctico que llamativo en menús y carta. Colorido y luminoso, el Mandarina (no debe confundirse con un efímero vegetariano que pululó por las redes sociales hasta su cierre aprovechándose del nombre) también es diáfano en su oferta gastronómica. "Al principio estábamos asustados por cerrar de noche, pero con el tiempo nos hemos dado cuenta de que aprovechamos mejor el tiempo para crear en casa muchos platos que al día siguiente sobresalen en el menú", enfatiza Ariadna , que se ocupa del salon, que aunque cobra mas protagonismo en la cocina a la hora de pensar y preparar el servicio de comidas, cada vez mas solicitado.
También tienen una oferta de comida para llevar, de mucho exito en el barrio de noche con platos que se pueden encargar y que el cliente pasa a retirar en una hora en concreto. No abundan los fritos ni los platos guisados mucho tiempo, ni tampoco hay una excesiva condimentación. Un menú de Bib Gourmand (distintivo que recibieron de la Guía Michelin) se consolida con una buena relación calidad-precio. La mayoría de los platos de la carta tienen un símbolo para recomendaciones saludables. En ocasión de una comida reciente, pudimos compartir una burrata que podía haber sido más fresca, para después saborear el tartar de atún rojo y el tronco de merluza de palangre con verduritas y aceite de trufa. Una merluza privada de las espinas y la piel, cocinada en su punto y acompañada por un lecho de verduritas y setas cuidadosamente preparados en wok.
Los carnívoros de la mesa vecina disfrutaron de un entrecot de ternera de Nebraska Black Angus a la parrilla que quedó citado para nuestra proxima visita . También de los postres se encarga Jordi. La carta de vinos es mejorable .