El restaurante Nuria —abierto en 1926 en lo alto de la Rambla, y dirigido por la tercera generación de propietarios— es historia viva de Barcelona (y uno de los sitios más fiables para comer en la Rambla). Y quieren poner su granito de arena para mejorar la situación difícil que parte el paseo más emblemático de la ciudad, huérfano ahora de turistas y con el cliente local receloso de acercarse.
Proponen una fórmula de lo más generosa para que vuelva a la Rambla: dos rutas históricas y culturales guiadas por este paseo y alrededores, que empiezan o terminan con una comida de los bonos al Núria. En colaboración con David Revelles, periodista especializado, han creado la ruta BarceDONA, que quiere dar voz y presencia a las mujeres que han marcado el perfil y la historia de la ciudad y, sin embargo han sido silenciadas u obviadas, durante siglos, por la historiografía: mujeres como Clotilde Cerdà, la hija de Ildefons Cerdà, la Moños, Teresa Claramunt o médicas pioneras como Martina Castells y Dolors Aleu.
La otra, Del Nuria a la Plaza Real, recorre y contextualiza los espacios más icónicos de la Rambla, prestando atención al apasionante pasado de la plaza Real y llena anécdotas y curiosidades vinculadas a personajes como el mago Fructuoso Canonge, el pintor Ocaña —mente libre y transgresor de la movida barcelonesa de los años 70 y 80– el ilustrador Nazario, vecino de la plaza y amigo del Núria, o el mismo Dalí.
Lo mejor de todo es que antes o después del recorrido comeréis en el Núria: por 35 €, la experiencia incluye un menú generoso de tapas clásicas (ensalada de tomate y atún, calamares a la andaluza, bravas) paella de marisco de la casa, postres y vino. Podéis hacer la reserva de la ruta, con todas las medidas de seguridad y distancia pertinentes, en la web del restaurante. Las visitas tendrán lugar los sábados 3, 17 y 24 de octubre, cada uno de estos días con una ruta que comienza a las 12 y las 14 h.
¡Una manera bonita y popular de redescubrir la Rambla y el Nuria!