1. Seguid los caminos de Ronda
Poneros las botas, que os esperan caminos cerca del mar impresionantes (¡y también algún baño!). Las rutas a pie paralelas a la costa son muy variadas y encontraréis para todos los gustos y rincones de la costa de Barcelona. Por los caminos de ronda del Delta de Llobregat podréis observar no solo una flora vegetal bien diferente de la de todo el país sino una fauna única y aves llegadas de todo el mundo. ¿Sois más de historia? En la costa del Maresme encontraréis esas rutas que antiguamente hacían los pescadores, contrabandistas y vigías de la zona. Unos caminos que pasan por pueblos costeros con mucho encanto. ¡Atreveros con los caminos de ronda, un clásico del verano!