1. De mercado a mercado
Uno de los grandes planes de Navidad es visitar sus mercados: perdernos entre sus bonitas decoraciones, elegir el 'caganer' para nuestro pesebre y buscar y rebuscar entre su artesanía a la caza del regalo perfecto.
Para las fiestas, Barcelona se llena de estos mercados y ferias, pero, sin duda, los que año tras año son los protagonistas de la felicidad e ilusión de mayores y pequeños son los de la Sagrada Família y el de Santa Llúcia.
Sí, están muy separados entre sí, pero cada uno guarda su personalidad y su esencia única y es por esto que con vuestras motosharing plantaros en cada uno de ellos será de lo más fácil.
Ponedlas en marcha y no olvidéis el casco: y es que una de las ventajas de las motos de 'sharing' es que no hace falta comprar uno: cada vehículo cuenta con dos de ellos debajo de su asiento. ¡No hay excusas para no ponérselo! Pero no solo vale ponérselo, debéis ajustar correctamente la correa si no queréis arriesgaros a la pertinente multa. Así que, subíos a vuestra motosharing y ¡disfrutad de la Navidad!