Ostras, champán y vómitos
Una vez, Don Draper y Roger Sterling decidieron regalarse un buen atracón, y se fueron a un restaurante a ponerse hasta el culo de champán y ostras. Siempre pensamos en ellos cuando pasamos por delante del Gouthier, templo del viejo Sarrià, que hace años que se ha convertido en un referente en bivalvos traídos de Marennes, Normandía, la Bretaña, Irlanda y el delta del Ebro. Para acompañarlas, os recomendamos una copa de Baron-Fuenté Grande Réserve. Saldréis flotando. Un consejo: cogeos la tarde libre, que aquel par de locos, imprudentes, volvieron al trabajo y el asunto acabó con vómito sobre la moqueta. Mirad la foto, no tiene desperdicio.