Morro Fi
Hay un chaflán orientado al norte que hierve y no sólo porque caiga el sol al mediodía: es por obra y gracia de El Morro Fi, que los fines de semana se convierte en el hormiguero por el que desfila la clase trabajadora (y creativa ) del barrio. Si veis que a partir de las 13 h ya no hay taburetes disponibles, hay que hacer el primer sorbo de vermut de pie, mientras se espera un lugar en la barra para degustar unos de las mejores berberechos que he probado nunca, empapados de vinagre y pimienta, y las patatas gruesas, con salsa de aperitivo, de lagrimita.