Cuando decimos que hablamos 'con el corazón en la mano', o que hablamos 'desde el fondo del corazón', podríamos mentir. O nos podríamos engañar, esforzándonos a pensar algo que no es lo que de verdad nos pasa en el corazón, lo que sentimos de verdad ... Y es que el dominio de la palabra nos permite mostrar a los demás nuestra alma, pero también nos permite esconderla.
En esta instalación interactiva de Fèlix Vinyals y Art Biotrònic, en cambio, las bombillas son la proyección real de lo que dice nuestro corazón. Se encienden y apagan al ritmo de nuestros latidos. Aceleran y ralentizan según nuestras auténticas vivencias internas.