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El buen tiempo es sinónimo de hacer planes al aire libre, viajes y disfrutar de las maravillosas playas y paisajes que nos rodean. Si también tenéis ganas de aventuras y no os importa coger el coche para alejaros un poco de Cataluña, os proponemos un plan. A finales de este mes de junio, el Valle de Tena de Huesca, a poco más de 30 minutos de la frontera con Cataluña, acogerá una experiencia única en la zona: un laberinto natural de tres kilómetros. En unos días, podréis visitar el Laberinto de los Pirineos, formado por 4.000 cipreses que forman 5.000 m² de caminos naturales, por donde os perderéis varias veces antes de encontrar una de las cinco salidas.
El laberinto del Pirineo Aragonés nació en el 2019 después de que su responsable, Juan Fanlo Belio, visitase el laberinto de Villapresente, en Cantabria. Pese a que la pandemia paralizó el proyecto, cuatro años después se ha podido inaugurar gracias a un gran equipo detrás formado por la familia y amigos de Fanlo, que han participado en el proceso de plantación de los cipreses. "El Laberinto de los Pirineos está formado por todas las personas que me rodean", asegura Fanlo en la página web del equipamiento. Además, si visitáis el espacio también os encontraréis con Niebla y Ton, dos perros que nacieron cuando se plantaron los cipreses y que se han convertido en las mascotas del espacio y que podrán jugar con las vuestras, que también son bienvenidas.
Los responsables avisan de que, si visitáis el laberinto durante los meses de calor, es recomendable traer de casa una botella de agua para hidratarse, ya que no hay fuentes ni zonas de descanso, eso sí, hay una zona de pícnic con unas vistas privilegiadas al embalse de Bubal y al Valle de Tena. Sin embargo, si os olvidáis la bebida o llevar algo para picar, no os preocupéis porque, en la pequeña cabaña donde se pueden comprar las entradas en persona, también se pueden adquirir refrescos y diferentes 'snacks'.
Precios y horarios
Si queréis ser de los primeros en visitar el laberinto, las entradas ya están disponibles en su página web por 7 euros para adultos y 4 euros para niños entre 4 y 12 años. Sin embargo, el acceso es gratis para los menores de 4 años y hay tarifas especiales a consultar para grupos de más de 20 personas. Sin embargo, las entradas no variarán de precio durante toda la temporada de apertura.
El laberinto estará abierto desde este mes de junio a principios de noviembre, aunque el horario variará según el mes y la estación del año. Durante julio, podréis visitar el espacio de 11 a 18 h del jueves al martes y de 10 a 19 h los sábados; en cambio, durante el mes de agosto lo podréis hacer cada día de 10 a 19 h. La primera quincena de septiembre, el espacio abrirá de jueves a martes de 12 a 17 h y, durante la segunda, lo hará de 12 a 17 h de viernes a lunes y de 11 a 18 h los sábados. Durante octubre se podrá visitar los viernes, sábados y domingos de 12 a 17 h. El 1, 2 y 3 de noviembre serán los últimos días de apertura del laberinto, aunque los horarios todavía no se han confirmado.