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La oferta cultural de Barcelona es casi interminable: desde exposiciones hasta la cartelera de cine y la programación de conciertos, el abanico está en constante evolución y siempre existe alguna opción para todos. La cartelera de teatro también es uno de los puntos fuertes de la cultura de la ciudad y, detrás, hay teatros que llevan décadas trabajando para mantener vivo el teatro barcelonés de una manera excepcional. Ahora, la labor de uno de los equipamientos de Barcelona ha sido reconocida a nivel estatal: el Teatro Romea ha sido galardonado con la Medalla de Oro de la Academia de las Artes Escénicas de España.
Para que nos entendamos, el galardón es la máxima distinción de la Academia (como el Goya a mejor película, pero para los equipamientos de teatro) y reconoce las iniciativas que trabajan por la excelencia y la dignidad de todas las profesiones dentro del sector de las artes escénicas. Aunque ya es oficial, el Teatro Romea recibirá el premio de forma presencial el próximo 4 de noviembre durante una ceremonia en el Teatro Calderón de Valladolid. De hecho, esta será la primera vez en los últimos diez años que la gala se celebrará fuera de Madrid.
Pese a que ha recibido la máxima distinción y ha sido el único de Barcelona reconocido, el Teatro Romea no ha sido el único que ha recibido un premio en la edición de los galardones de este año. La compañía andaluza La Zaranda, el Teatro Palacio Valdés de Avilés, el Teatro del Soho Caixabank de Málaga y el Palacio de Bellas Artes de Ciudad de México también han sido merecedores de otros reconocimientos por parte de la Academia de las Artes Escénicas de España.
El Teatro Romea, un equipamiento emblemático de Barcelona
Con más de un siglo de vida, el Teatro Romea se ha convertido en un emblema, no solo de la escena teatral, sino de la historia de la ciudad. El equipamiento nació como teatro privado en 1863 y estaba orientado a la pequeña burguesía ya las clases populares, un objetivo que se mantuvo durante unos 100 años hasta que en 1981. Durante las dos últimas décadas del siglo pasado, el teatro se convirtió en el Centro Dramático de la Generalitat, que funcionó como teatro nacional hasta la creación del Teatro Nacional de Cataluña (TNC) que ahora conocemos. En 1999 comenzó una nueva etapa bajo la gestión del Grup Focus y diferentes directores, como Calixto Bieito y, actualmente, Josep Maria Pou, que le han convertido en un espacio de actualidad artística con compañía propia.
En cuanto a la programación del teatro, es conocida por arriesgar con nuevas propuestas adaptadas en la actualidad, que aportan el carácter transgresor y provocador sin dejar de lado la reflexión y el entretenimiento. Ahora, el teatro acaba de recibir la Medalla de Oro de la Academia de las Artes Escénicas de España, pero no es el primer galardón que recibe, sino que se añadirá a la vitrina junto a otros como el de Mejor Programación de Teatro de España en 2005, la Medalla de Oro al Mérito Cultural del Ayuntamiento de Barcelona en 2014 y la Creu de Sant Jordi de la Generalitat de Cataluña en 2015, entre otros.