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Con la llegada del calor, plantarse sudado y ahogado en los lugares es habitual, por eso cualquier trocito de sombra sirve como parada en boxes. Respirar profundamente, secarse las gotas de la frente (y del bigote) y beber agua refugiándonos del sol puede ser el acto que nos haga llegar a nuestro destino con un aspecto mínimamente decente. En Barcelona existen varios lugares pensados para este ritual. De hecho, el Ayuntamiento ha creado toda una red de espacios de refugio climático que proporcionan confort térmico a la población mientras mantienen otros usos o funcionalidades. Sin embargo, el consistorio no es el único que piensa en hacer amena la temporada calurosa a los ciudadanos.
El Centre d'Arts Santa Mònica ha colocado una instalación temporal en su terraza diseñada para suavizar las condiciones climáticas durante los meses de verano, a la vez que actúa como espacio cultural. 'Teló', creada por el equipo de arquitectos formado por Marta Monlleó Rius, Eduard Rodríguez y Martínez y Jaume Xicola Pachón, es una estructura ligera de color rojo cubierta por una sucesión de cuerdas del mismo color que generan un espacio de sombra.
La propuesta, que fue seleccionada a través de una convocatoria pública, quiere realizar un homenaje al pasado marinero ya la escena teatral propios del Raval, donde se encuentra el Centro. Al mismo tiempo, 'Teló' pretende confeccionar un espacio de integración urbana que conecte el Santa Mònica y la Rambla y que invite a subir y disfrutar de este espacio abierto y gratuito. Aparte, la estructura convierte la terraza en una extensión de la Sala Bar y en un escenario abierto donde escenificar la programación periódica (y gratuita) del centro.
'Teló' ocupa un área de casi 75 m² de la parte central de la terraza y se configura en dos espacios: la 'zona de estancia' y la 'zona de tráfico-mirador'. El primero, que funciona también como recepción de los usuarios, va cubierto por una serie de cuerdas colocadas paralelamente unas a otras, conformando así un arco que cae verticalmente y separa los dos espacios. En el segundo, las cuerdas se disponen más separadas y tensas y se descuelgan de la terraza hacia la calle.
Aparte de la instalación de esta estructura, el centro expositivo y de investigación se suma, un año más, a la red de espacios del proyecto comunitario #RavalEstiuEducatiu, un proyecto del Grup d'Educació Comunitària del Raval y dinamizado por la Fundació Tot Raval, que ofrece actividades de ocio educativo para los niños y jóvenes del barrio durante el verano. Este año, la iniciativa celebra su quinta edición y, repitiendo el modelo del pasado año, ha vuelto a crear un mapa del Raval con diversas propuestas gratuitas y abiertas a todo el mundo que recoge diferentes refugios climáticos, con áreas interiores y exteriores de descanso, climatización y agua, así como espacios de juego, para leer y hacer deporte.