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La inflación ha llegado a casi todos los sectores de la sociedad; la vivienda ha sido una de las más afectadas, así como la de la alimentación. Dentro de este último, hay productos que se han convertido en auténticos tesoros alimenticios, como es el caso del aceite de oliva. España es el país de Europa donde más se ha disparado el precio del aceite, más del 40% en comparación con el 2022, una cifra que sitúa el precio del litro de aceite de marca blanca en casi 10 euros.
Ahora sí que podemos decir que el aceite de oliva es el oro líquido de la actualidad, tanto que también se ha convertido en objeto de robos. La madrugada del lunes 29 de enero, el almacén situado en el polígono industrial de Castellví de Rosanes, en la provincia de Barcelona, de Olis Bargalló fue asaltado por un grupo de ladrones que se llevaron unos 10.000 litros de aceite de oliva, además de la caja fuerte. Según ha calculado Francesc Bargalló, el propietario de la empresa, las pérdidas han superado los 70.000 euros, lo que convierte a este robo en uno de los más importantes de la zona de las últimas décadas.
Según suponen los trabajadores y dueños de Olis Bargalló, los asaltantes consiguieron desactivar los sistemas de seguridad y accedieron al recinto con un camión, donde cargaron varias cajas de garrafas de aceite de oliva virgen extra de 5 y 2 litros, aceite de oliva suave de 5 y 2 litros y aceite gustoso de 5 litros. Los ladrones también se llevaron botellas de 500 ml de AOVE arbequina y aceite de oliva virgen extra en formato marasca, dentro de botellas de vidrio verde.
Francesc Bargalló ya ha denunciado los hechos a los Mossos d'Esquadra, aunque también ha alertado a sus clientes y ha pedido colaboración para poder arrestar a los culpables, ya que podrían poner a la venta los productos fuera del mercado habitual de la marca, en mercados y restaurantes, entre otros.
El segundo robo en menos de un año
No es la primera vez que las instalaciones de Olis Bargalló sufren un robo. Hace menos de un año, en abril de 2023, también asaltaron sus instalaciones, aunque los delincuentes solo causaron pérdidas económicas, puesto que no se llevaron ningún producto del almacén. En esta ocasión, sin embargo, "lo tenían todo planificado (...) eran especialistas y sabían a lo que venían", asegura Bargalló en nota de prensa.