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Sopla poco viento en veleros de otras épocas. Tanto es así, que un emblemático hotel de Barcelona cerrado desde la pandemia cambiará de nombre para dejar atrás un homenaje monárquico que no acaba de encajar bien en los tiempos que corren.
Esta semana conocíamos la resolución de un caso que ha traido cola a los tribunales. Un litigio que finalmente da la razón a la cadena hotelera Melià que se hará con la gestión de un establecimiento de grandes dimensiones de la zona alta de Barcelona, uno de los hoteles más singulares de Catalunya.
En consecuencia, hace unas horas que Melià ha anunciado que abrirá de nuevo el Hotel Juan Carlos I, pero con un cambio de nombre, por tanto, ahora pasará a llamarse Gran Meliá Miranda de Pedralbes.
Se suma a la operación la apertura del Palacio de Congresos que el hotel tiene incorporado en sus instalaciones, que está previsto que abra incluso antes de la inauguración del establecimiento prevista para enero de 2024.
El nuevo complejo hotelero quiere posicionarse como “un oasis de tranquilidad” en la ciudad, según sus responsables, un espacio de lujo de grandes dimensiones que cuenta también con 25.000 metros cuadrados de jardines históricos de estilo romántico y modernista que ya no llevarán el nombre monárquico con el que hasta ahora los conocíamos.