[title]
Sabemos que preguntar cuál es la tapa y plato típico preferido de alguien puede traer controversia: la ensaladilla y las patatas bravas son algunos de los platos más repetidos en el ranking. Pero en la lista nunca falta quien dice las croquetas. En Barcelona se pueden encontrar decenas de bares donde degustarlas de todo tipo; desde las clásicas, como las de cocido o jamón, hasta otras más elaboradas, como de morcilla con manzana.
Esta tapa no solo es venerada en Barcelona, sino que es una de las reinas de la carta en toda España. Hay locales que, como el Catacroquet barcelonés, que se han especializado en este plato. Es el caso de Solo de Croquetas, un restaurante de Madrid que las elabora con un montón de recetas, y que lleva unos años celebrando un concurso que pone a prueba a los comensales. En la edición de este año, Valentín Carrasco ha batido el récord de comer croquetas y ha engullido 237 en dos horas y 55 minutos. En total, el joven de Murcia ha comido 5,94 kilogramos de croquetas en menos de tres horas.
La segunda posición ha sido para Adrián Ortega de Valdemoro, un hombre de 31 años que logró zamparse 182 croquetas de 25 gramos y alcanzó los 4,55 kilos. El tercer puesto ha sido para Manuel Rodíguez, un canario de 26 años que ha alcanzado las 130 croquetas y los 3,25 kilos.
Un récord de 1936
Carrasco ha superado el récord que Patxi Bollos estableció en 1936, cuando se comió 236 croquetas. Pese a tener el dato, no se sabe mucho más sobre su figura: solo que era vasco y que trabajaba en una fábrica de cerveza en San Sebastián. Sin embargo, el récord no lo logró en un concurso, sino que Bollos debía haber entregado un pedido a un banquete de 236 croquetas que nunca llegaron a su destino.