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La crisis sanitaria ha tenido y tendrá muchos efectos colaterales, sociales y económicos; entre las cosas positivas destaca el testimonio de niños y niñas de todas las edades reconquistando el espacio público y plazas como el pla de la Catedral, la plaza del Rey y la Rambla, convertidas en zonas de juego libre y de descubierta. Tres familias vecinas del Gòtic norte con niños de entre 3 y 6 años han querido dejar constancia de ello en un vídeo que reivindica que "un espacio público para los niños es un espacio público para todos".
El vídeo, de Josep M. Boronat, Marta Antuñano, Xavier Lastra y Natalia Robledo al que ha puesto voz Oscar Dalmau, es una pequeña acción para visibilizar como adultos y niños han disfrutado del barrio y al mismo tiempo reivindicar posibles nuevos escenarios y funciones del espacio público. "Del mismo modo que se reserva un día para anticuarios y sardanistas y hay un lugar para los músicos, se podría reservar la plaza de la Catedral también para el juego libre de niños", defienden.
"En las primeras salidas después del confinamiento, nuestro hijo de tres años pudo ir por la Rambla con patinete y jugar a saltar en el Pla de l'Os, los podía apreciar y jugar en el espacio público hasta ahora imposible por la presión turística, entre otras razones", apunta una de las autoras del vídeo. "Una situación idílica, pero ha hecho falta una pandemia –y un confinamiento en el que los niños han sido olvidados– para que los niños puedan disfrutar de sus plazas", añade.
"Vivimos poca gente en Ciutat Vella, pero para un niño es aún más difícil", dicen señalando las infraestructuras: por ejemplo, hay ocho áreas de juego infantil para diferentes franjas de edad en los barrios Gòtic y Sant Pere, Santa Caterina y la Ribera. Estos días el espacio público y sus elementos urbanísticos (la rampa de la Catedral, las escaleras de la plaza del Rey, más la escultura de Chillida en la misma plaza) han sido los mejores aliados para el recreo de los vecinos y vecinas más jóvenes del barrio.