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Con casi un año de atraso, parece que la biblioteca de Sarrià tiene ya fecha de estreno: en verano. Las obras de la instalación, reclamada por los vecinos desde hace veinte años, se iniciaron en junio del 2021 con la previsión de terminarse en octubre del año pasado, pero un descubrimiento de restos arqueológicos en el terreno retrasaron los planes. El 'tiempo perdido', sin embargo, no se ha desperdiciado, ya que ha permitido que el Ayuntamiento acepte que la elección del nombre del equipamiento municipal sea a través de un proceso participativo vecinal.
Así, los ciudadanos podrán elegir por votación entre cuatro opciones; dos propuestas por el Ayuntamiento y dos por la Taula d'Entitats de Sarrià. El consistorio ha puesto sobre la mesa el nombre del poeta y periodista J. V. Foix y el de la dibujante y periodista Núria Pompeia. Por su parte, la coordinadora de asociaciones y entidades del barrio ha sugerido el de la pedagoga y traductora Carme Serrallonga y el del escritor y pedagogo Emili Teixidor. Desde la Taula, han tenido en cuenta que sus propuestas literarias no tengan ningún reconocimiento en el espacio público, ni en el barrio ni tampoco en el resto de Barcelona.
La votación aún no tiene fecha, pero se sabe que estará abierta en toda la ciudad mayor de catorce años a través de la plataforma Decidim.Barcelona. De hecho, así es como se escogió también el nombre de la biblioteca del Fort Pienc, que se ha acabado nombrando Biblioteca Fort Pienc - Ana María Foix.
La nueva biblioteca pública de Sarrià
Aunque todavía no se sabe por qué nombre se conocerá, sí se conocen los detalles de cómo será el nuevo equipamiento situado en el paseo de la Bonanova. La instalación constará de más de 1.500 m² de superficie y tendrá cuatro plantas y una azotea con una parte ajardinada y otra pavimentada disponible para actividades cívicas. Será un edificio multifuncional, puesto que funcionará como biblioteca, pero también acogerá las oficinas municipales del Distrito y la Oficina de Atención Ciudadana.