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Las estatuas de Barcelona se han levantado este jueves 19 de octubre con una pulsera rosa en la muñeca para unirse al Día Mundial contra el Cáncer de Mama. Este tipo de cáncer es el que tiene la tasa de mortalidad más alta entre las mujeres y, para dar visibilidad a la enfermedad y recordar que todavía queda mucho por hacer, la Asociación Contra el Cáncer en Barcelona ha puesto en marcha diversas propuestas para teñir la ciudad de color rosa. Las estatuas se han convertido en las embajadoras de la iniciativa 'El rosa es más que un color', aunque también ha impulsado otras como 'La Noche Mágica' donde varios edificios emblemáticos de Barcelona y otros municipios se iluminarán la misma noche del 19 de octubre.
El arte de la ciudad se ha solidarizado con la lucha contra esta enfermedad que afecta, aproximadamente, a una de cada ocho mujeres. Algunas de las obras más emblemáticas de la ciudad también han lucido la pulsera, como es el caso del monumento a la sardana, del dibujante y escultor Josep Cañas i Cañas, situada en la carretera del Castillo de Montjuïc.
No solo las estatuas que representan cuerpos humanos han participado, sino que algunos de los animales más famosos de la ciudad también se han querido sumar, como el gran mamut de hormigón del Parc de la Ciutadella y la Jirafa Coqueta, en lo alto de la Rambla Cataluña.
