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Los lectores de determinadas edades no sabrán de qué estamos hablando, así que ahí va una mini lección de historia. Había una vez un mundo lejano, previo a la existencia de Netflix, HBO o Amazon Prime, donde las personas, si querían ver alguna película en particular que no dieran por la televisión, debían alquilarlas en cintas de vídeo en las tiendas que se dedicaban a ello. Una de las grandes cadenas a nivel mundial se llamaba Blockbuster y, lógicamente, fueron desapareciendo todas, igual que los reproductores de vídeo en los hogares de todo el mundo.
Pero, sorprendentemente, hay un Blockbuster que aguanta, el único que queda 'vivo' en el mundo. Está en Bend, Oregón (Estados Unidos) y para agradecer el apoyo que está recibiendo de sus vecinos, la gerente de la tienda, Sandi Harding, ha decidido incluir la tienda en la bolsa de alojamientos de Airbnb pero por un tiempo muy limitado.
Si se os han iluminado los ojos que habéis empezado a preparar ya vuestro viaje a Oregón, siendo deciros que solo los residentes del condado de Deschutes, el área que la tienda considera "su hogar" podrán reservar la casa. En total, solo se podrá reservar tres noches –solo un grupo por día–, las del 18, 19 y 20 de septiembre y cada una para un máximo de cuatro personas. Y aún queda lo mejor, la estancia solo costará 4 dólares.
Para que la gente de todo el mundo también pueda revivir esta experiencia tan noventera, Harding ha lanzado el proyecto Callgorithm, donde los aficionados al cine pueden llamar a la tienda al teléfono 541-385-9111 para que el personal os recomiende películas en función de vuestros gustos. Vamos, lo que hacían en los viejos tiempos.
¡Mirad lo bonita que han dejado la tienda para la ocasión!