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Barcelona se recupera ya poco a poco de las consecuencias de la pandemia. La renta disponible de los hogares barceloneses (RDL) durante el tercer trimestre de 2023 aumentó un 11,6% con relación al mismo período de 2022. Este dato no solo supera el año anterior, sino que también significa que la capacidad adquisitiva de los hogares supera el nivel anterior a la pandemia. Estos son dos de los datos que ha recogido el Informe de la Renta trimestral de los hogares de Barcelona de la Oficina Municipal de Datos, que también muestran que la tasa de variación interanual de la RDL de Barcelona es algo superior a la dinámica del conjunto de la economía española, un 10,6%.
Si comparamos la situación actual de la RDL en Barcelona y la de antes de la pandemia, se constata que, en términos nominales, desde el tercer trimestre de 2021, ya lo largo de todo 2022 y 2023, se ha llegado y superado el nivel de renta prepandemia, un 18% superior. Además, en relación con la composición de los recursos de los hogares, el informe muestra que la Remuneración de Asalariados y las Prestaciones Sociales registran tasas interanuales positivas, del 7,9% y del 8,1% respectivamente, mientras que las Rentas Mixtas, que incluyen los rendimientos del trabajo de profesionales y autónomos, alquileres y rentas de la propiedad, presentan una tasa del 20,4% derivada, en parte, por la dinámica de las rentas de la propiedad.
El incremento de los precios también tiene un efecto directo en la capacidad adquisitiva de los hogares y, según el informe, a pesar de la inflación y sus circunstancias, la ciudad en los tres trimestres de 2023 se ha alcanzado, de forma muy ligera, la capacidad adquisitiva de antes de la pandemia, con un valor 2% por encima de la capacidad adquisitiva anterior a la crisis generada por el COVID-2019.
La vivienda en Barcelona, cada vez más cara
La inflación ha afectado a muchos sectores, como el de la alimentación, el textil y el de la restauración, aunque uno de los más afectados ha sido el de la vivienda. Este encarecimiento no solo se ha notado en Barcelona, sino también en el resto de Cataluña, donde una habitación en un piso compartido cuesta ya 582 euros de media. La cifra aumenta si hablamos de Barcelona, con 614 euros de media, un dato que la consolida como la ciudad más cara para compartir vivienda.
Ante la subida de los precios del alquiler, que lleva semanas alcanzando niveles récord, el gobierno anunció que la limitación de los precios de los alquileres se pondrá en marcha en toda Cataluña durante el mes de febrero. La medida afectará a 140 municipios catalanes, entre los que se encuentra Barcelona.