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En Barcelona existen unos 180.000 perros. Pero, ¿cuántos de estos animales están bien educados? Para mejorar la convivencia entre las mascotas y las personas en los espacios comunes, el Ayuntamiento ha puesto en marcha una campaña que vigilará en varios puntos de la ciudad las conductas relacionadas con la tenencia de animales de compañía que pueda alterar la convivencia o que degradan el espacio público.
La iniciativa la llevará a cabo la Guardia Urbana de Barcelona durante esta Semana Santa, hasta el próximo domingo 31 de marzo. Los objetivos principales del control son sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de los comportamientos cívicos respecto a la tenencia de animales de compañía, sobre todo de perros. Concienciar a los propietarios de la normativa actual, verificar que los animales están identificados y que llevan sistemas de sujeción y evitar la presencia de compañía en los parques infantiles también son objetivos prioritarios de la campaña.
Esta medida se enmarca dentro del Plan Dirección del Ayuntamiento que también impulsó una campaña de informadores en las zonas para perros desatados en todos los distritos. Los informadores explicaron a varios propietarios la nueva normativa para pasar a los animales por algunas zonas de Barcelona.
Muchos para llevar a los perros desatados
El pasado mes de noviembre, el Ayuntamiento anunció que multaría con sanciones de hasta 300 euros a quien llevara a su perro desatado fuera de los espacios y horarios establecidos. El consistorio habilitó 109 zonas donde los animales pueden pasar libremente, espacios que se sumaron a los 166 pipicanes que ya existían en varios puntos de la ciudad. En caso de incumplir la normativa, las muchas van de los 100 a los 300 euros, dependiendo de si la raza del perro está o no presente.