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¡Los premios Time Out Cultura 2024 ya tienen ganadores y ganadoras! Este lunes 11 de noviembre, el Time Out Market Barcelona ha acogido la gala de entrega de la 14ª edición de los premios que celebran lo mejor de la producción cultural barcelonesa, con representación del teatro, de la danza, la literatura, el cine, el arte y la música, así como de los festivales, eventos y espacios que han marcado la diferencia en la ciudad durante los últimos doce meses.
500 asistentes han disfrutado de la gala presentada por Pitita Queen, de la actuación de Ouineta, del menú degustación Michelin de los chefs del Time Out Market Jordi Artal, Fran López, Lena Maria Grané & Ricki Smith con postre de Bubó, y del fin fiesta con DJ HAL 9000 (una muy buena muestra de lo que os encontraréis si visitáis el Market).
En esta ocasión, el jurado lo han formado Anna Cerdà (gestora cultural y actual directora de la sala Paral·lel 62), Júlia Bertran (periodista cultural del 3Cat), Andreu Gomila (escritor y periodista especializado en artes escénicas colaborador de Time Out), Glòria Rius (directora de negocio de la Fundació Joan Miró y profesora del Máster de Gestión Cultural de la UOC), Coloma Serra (directora de comunicación de Barcelona Capital Náutica), y cuatro editores de Time Out Barcelona: Borja Duñó, Eugènia Güell, Rita Roig y María José Gómez; y ha sido presidido por Eduard Voltas (director general de estrategia de Time Out para España y Francia).
A continuación, todos los ganadores y ganadoras:
Mejor creador o creadora
Victoria Szpunberg ha sido la merecedora del premio a Mejor creadora no porque lleve buena racha, sino porque es una dramaturga y directora teatral excepcional. Porque en sus últimas obras –'Mal de coraçon', 'El pes d'un cos' y 'L'imperatiu categòric'– sitúa a los personajes en situaciones críticas, con una mirada muy abierta e incisiva al mundo contemporáneo. Szpunberg competía con la escritora Eva Baltasar, autora de la primera obra en catalán finalista del International Booker Prize con historias que ponen a las mujeres en el centro, están escritas con un lenguaje poético cautivador; y con la bailarina y coreógrafa Núria Guiu por su trabajo en 'Supermèdium', una historia bailada de la danza misma que creaba puentes intergeneracionales, con grandes dosis de humor y una energía inquebrantable.
Mejor obra
'Casa en flames', de Dani de la Orden, ha merecido el Premio a mejor obra, y no solo porque se ha convertido en un fenómeno (ya es la película más vista en catalán en Cataluña), sino porque con un despliegue de protagonistas memorables –Vilarasau, Segura, Auquer, Rodríguez Soto…–, el guion funciona como un engranaje perfecto y nos ha hecho reír. 'Casa flames' competía con 'Balla la masurca!' el primer disco en solitario de Guillem Gisbert, un compendio de canciones repletas de ideas líricas y musicales que desafían constantemente al oyente; y con 'La nit ovípara', de Maria Sevilla Paris, un poemario lovecraftiano denso, valiente y transgresor que nos aturde con la fuerza de las palabras.
Proyecto más innovador
El Festival BOCA, porque es un festival creado por y para jóvenes de 14 a 19 años que defiende la diversidad, la igualdad y el acceso a la cultura desde la conexión con la música y el poder transformador de la presencialidad. Ellos mismos deciden y protagonizan la oferta cultural, con el apoyo y la mentorización de NouPOP, el CCCB y profesionales de la industria musical. Competía con Racoon Projects, un proyecto pequeño pero exigente de la comisaria Margot Cuevas, que quería alejarse de las galerías comerciales para tejer relaciones fructíferas con los creadores; y 'Memòries sintètiques' de Domestic Data Streamers, una oficina abierta a todo el mundo que creó imágenes con inteligencia artificial de los recuerdos que los ciudadanos explicaban.
Mejor evento o festival
El Oyofe Festival, porque pocos eventos desprenden su buen rollo y alegría, un encuentro participativo con sede en Barcelona que gira en torno a los diversos estilos de danza africana y que reúne a cientos de personas de todo el mundo atraídas por el estimulante latido de la cultura y la música del continente. Competía con Manifesta 15 Barcelona Metropolitana, la bienal nómada europea de arte contemporáneo que ha llenado Barcelona y once municipios más con propuestas artísticas, abriendo nuevos espacios a la ciudadanía; y Ràdio Pati, que demuestra que para hacer un festival de nivel profesional, y que además tiene un impacto en la investigación contra la metástasis, solo hacen falta música y amistad.
Mejor exposición
La ganadora es 'Miró-Picasso', en el Museu Picasso y la Fundació Miró, porque gracias a que en 1921 Miró visitó el estudio de Picasso en París con una ensaimada bajo el brazo, sus trayectorias se fueron entrelazando y de aquí salió esta exposición dual en estos dos grandes templos del arte que trajeron a Barcelona obras de arte icónicas provenientes de todo el mundo para que las contempláramos. Competía con 'Suzanne Valadon', una muestra del MNAC que nos ha descubierto una artista que pintaba con trazos modernos, colores vivos y una mirada singular a los temas de moda a finales del siglo XIX y principios del XX; y 'Núria Feliu al Palau (Robert)', el gran homenaje que Núria Feliu merecía en forma de exposición, comisariada por Òscar Dalmau y con guion de Julià Guillamon.
Mejor espectáculo
'De l'amistat', de Las Huecas, colectivo al que decidimos seguir la pista con 'Aquelles que no han de morir' y que han confirmado que son una de las compañías más inspiradas de la escena actual. La obra es un bulldozer que te sacude por la fuerza de un imaginario y un humor literalmente extraordinarios. Competían con 'El día del Watusi', de Iván Morales, que captó el alma de la trilogía de Francisco Casavella y superó con creces las expectativas; y 'Orgia', de Hèctor Parra con Calixto Bieito, que es una impactante ópera que nace a partir de la tragedia de Pier Paolo Pasolini que sacudió el público del Gran Teatre del Liceu.
Mejor iniciativa cultural social
enCantados, por contribuir a hacer la cultura más accesible. Gracias enCantados, que ha interpretado en lengua de signos conciertos de The Tyets, Aitana, Coldplay y Taylor Swift, entre otros muchos, las personas sordas pueden vivir una experiencia musical, y recordemos que la música no solo se escucha, sino que también se ve y se siente. Competían con Irídia Fest, que une la cultura con la defensa de los derechos humanos y que, a pesar de la gravedad de los temas que abordan cada día, nos dice que dejar de lado la alegría ya sería una derrota; y 'Màquines del temps', en las que 170 personas que se encuentran en prisión participaron en esta muestra del Arts Santa Mónica. El artista Antoni Hervàs, durante diez meses, visitó centros penitenciarios para tejer relaciones creativas y afectivas con los internos. El resultado es una exposición que reflexiona sobre la percepción del tiempo en prisión, la situación de encierro y la vulnerabilidad acumulada de los reclusos.
Mejor artista emergente
Mabel Olea, porque cuando esta coreógrafa, performer y bailarina se mueve, no puedes parar de mirarla: explora los límites del cuerpo con torsiones casi de ciencia ficción. Como un camaleón, Olea se hace suyo cada proyecto y deja huella: ha trabajado con los Javis y Rigoberta Bandini y se ha lucido tanto en televisión como en el escenario. Competía con La Moukhles & Sentís, compañía formada por Miriam Moukhles y Joan Sentís que, con 'Nodi: de perros y malditos', se convirtió en uno de los fenómenos de la temporada; y con una nominación ex aequo para Electro Ma Non Troppo y Gregotechno, dos proyectos musicales que sorprenden y equilibran la soltura con el respeto a tradiciones musicales (el barroco y el canto gregoriano, respectivamente) que demuestran que el 'fandom' joven es más diverso y curioso de lo que pensamos.
Apertura del año
El Molino, porque el mero hecho de que reabra un espacio tan emblemático para Barcelona es ya una noticia excelente y más con un proyecto tan estimulante como el que propone el Cruïlla, con Victor Partido como director: una experiencia de proximidad con la música (tocada) en primerísimo plano, con un sonido y un trato al espectador excelentes y el jazz y otras músicas singulares como faro. Competía con la sala de arte contemporáneo de la galería Mayoral, una apuesta optimista y exigente que nos permite ir de Miró o Tàpies hasta los artistas que crean desde nuestro presente; y con la Librería Sonora, un proyecto humilde, pero muy valioso donde la música pop y rock se explica a través de la tinta y el papel de los libros que llenan las estanterías.
Premio Time Out a la trayectoria
Mari Chordà, porque ni siquiera las palabras 'artista', 'activista' y 'poeta' hacen justicia a una trayectoria que, como el título de su poemario de 1976, es "moltes altres coses". El título lo ha heredado la exposición que el MACBA le ha dedicado este año: un homenaje -o, como diría ella, 'donatge' (mujeraje)– en vida por una creadora excepcional, enérgica e incansable. Desde Amposta, las Primeres Jornades Catalanes de la Dona y el Bar-Biblioteca La Sal, Mari Chordà luchó por la cultura catalana. Para ella, no había ninguna diferencia entre manifestarse, ir al bar, pintar un cuadro o escribir un poema. Por eso, hay que entender su obra y su vida como un todo indisociable.