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En Time Out somos conscientes de que somos unos privilegiados por vivir en Cataluña y estar rodeados de pueblos, paisajes y rincones maravillosos, por eso os recomendamos algunos a los que debéis ir sí o sí, al menos una vez en la vida. Nosotros, sin embargo, no somos los únicos que os animamos a explorar y descubrir el país, ya que medios internacionales de referencia en el sector de los viajes también lo hacen. Un municipio entre las rocas de la Costa Dorada ha llamado la atención de National Geographic, que lo describe como "una obra de arte". Estamos hablando del Roc de Sant Gaietà, una entidad de población de unos treinta habitantes situada en un extremo de Roda de Berà, en el Tarragonès.
Si nunca habíais oído hablar de él, se trata de un conjunto de casas donde el ADN mediterráneo se siente por todas partes, y no solo porque se encuentren a pie de mar. La urbanización está construida frente al mar Mediterráneo y está diseñada al estilo característico de los pueblos de pescadores. Si paseáis por sus calles, también encontraréis referencias a otros estilos de todo el Estado, como los característicos patios interiores de Andalucía. De hecho, este fue el objetivo del promotor Gaietà Bori Tallada y del constructor Josep Maria Fortuny Rodríguez, quienes iniciaron el proyecto en 1964 con la idea de crear una especie de barrio que recordara un pueblo marítimo con influencias no solo catalanas, sino también de otras partes del Estado y del mundo. Si levantáis la vista mientras camináis por sus calles, encontraréis maravillas de estilo románico, gótico e incluso árabe.
La publicación destaca que la forma en que está diseñada la urbanización recuerda al conocido como "típico pueblo español", caracterizado por incluir elementos como rejas y puertas de hierro forjado. En el caso del Roc de Sant Gaietà, muchas de las fachadas e infraestructuras incluyen la piedra de la cantera romana del Mèdol, también en Tarragona, y muchos de los marcos de las ventanas han sido recuperados de antiguas masías y casas abandonadas gracias al restaurador y artista Pep Gasol. Más allá de su belleza arquitectónica y las vistas desde las casas y calles dignas de postal, National Geographic también destaca algunas “atracciones turísticas” dentro de la pequeña área que los visitantes no se pueden perder.
Mucho arte y un claustro románico
Entre los espacios que destaca la publicación, se encuentra lo que iba a ser el Club Marítimo de la urbanización. Con el paso de los años y a medida que avanzaba el proyecto, el edificio se convirtió en un centro cívico con mucho encanto, tanto por dentro como por fuera. Una gran puerta que replica la de la iglesia de San Pedro en Ávila da la bienvenida a todos los usuarios que, una vez dentro, pueden visitar la galería de arte, el Museo de la Radio de Luis del Olmo y el Espacio Jujol, dedicado al artista Josep Maria Jujol i Gibert.
La última recomendación que hace National Geographic para visitar el Roc de Sant Gaietà es un claustro románico que describe como “uno de los rincones más bonitos” de la urbanización. En su interior se esconde Las tres Marías, un mural de Philippe Lavaill, un conocido escultor catalán establecido en Bescaran, en el Alt Urgell.