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No os sorprenderá si os decimos que estamos viviendo uno de los veranos más calurosos de la historia. El pasado martes 30 de julio, el Observatorio Fabra registró una máxima de 40 grados en la ciudad, un día tórrido que ya se ha convertido en lo más caluroso de la historia barcelonesa. Las altas temperaturas y el sol abrasante son más amables si nos cogen remojándonos en la playa o en la piscina, pero cuando toca tomar el metro y continuar con la rutina, la situación se complica. Para combatir las altas temperaturas que registran las estaciones de metro de Barcelona, TMB ha instalado 12 ventiladores en la parada de Hospital Clínic de la L5, seis en cada techo de ambos andenes.
La iniciativa se trata de una prueba piloto que se enmarca dentro del proyecto 'Respira' de gestión inteligente de la ventilación del metro y que tiene como objetivo rebajar la temperatura de los andenes y mejorar la sensación térmica del pasaje. Los ventiladores que se han utilizado están diseñados bajo criterios ambientales y de eficiencia energética y se utilizan desde hace unos años en zonas de trabajo del metro, como los talleres de los trenes. Ahora, los ventiladores también se han instalado en la estación del Hospital Clínic, la parada en la que se han registrado las temperaturas más altas durante los meses más calurosos. Para llevar adelante el proyecto, se ha realizado una inversión de 60.000 euros, que equivale a 5.000 euros por cada ventilador.
Para poder evaluar si los resultados de la prueba piloto son positivos, los técnicos realizarán varios estudios para determinar en qué otras estaciones de la red de metro de Barcelona también se podrían extrapolar los ventiladores. Más allá de este sistema, TMB ha avanzado que continuará la búsqueda de otras alternativas para reducir la temperatura y la humedad en las estaciones donde instalar ventiladores de techo no sea posible.
Un sistema de gestión inteligente
Todos los ventiladores que se han instalado en la estación de Hospital Clínic están vinculados con el sistema digital de gestión inteligente llamado 'Respira', que está activo desde 2019 en todas las líneas convencionales de la red de metro. Este sistema tuvo un papel clave durante la pandemia, puesto que se configuró para maximizar la renovación de aire en las estaciones del metro para reducir el riesgo de contagios. Y ahora, ¿cómo funciona? Respira es una plataforma de inteligencia artificial que, después de analizar distintos parámetros de la estación como la humedad y la calidad del aire, aplica un determinado funcionamiento de los sistemas de ventilación según las necesidades del espacio.