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'Hand Medal Project' nace de la voluntad de Jimena Ríos e Iris Eichenberg, amigas y joyeras, de agradecer todo el trabajo de los sanitarios durante la pandemia de la Covid-19 con una joya simbólica artesanal. Las dos artistas tuvieron esta idea en pleno confinamiento y en ningún momento imaginaron la repercusión que acabaría teniendo a escala global.
El diseño en forma de mano, muy sencillo, pero efectivo, se inspira en los exvotos y pretende representar en una sola pieza el amor y el respeto hacia todos los miembros de la comunidad sanitaria. "Los exvotos son diferentes de cualquier otra joya, son ofrendas para expresar la devoción y la gratitud, y eso es lo que queremos que nuestras medallas expresen", explican las creadoras.
El proyecto consiste en la colaboración altruista de joyeros para crear las medallas, que se enviaron a los sanitarios el 8 de noviembre. Actualmente, ya hay más de 60 países de los cinco continentes y 3.000 profesionales del sector de la joyería que participan en el proyecto.
¿Cómo funciona?
Cualquier joyero, de manera voluntaria, puede realizar el número de medallas que desee con un mensaje inscrito: "Gracias". De todos modos, para garantizar un diseño altruista las fundadoras del proyecto crearon una plantilla fácil de reproducir.
Una vez la joya ha sido pulida y acabada, entra en juego la figura del 'hand keeper', quien se encarga de recolectar todas las medallas y distribuirlas a los 'hand givers', los elegidos para entregarlas a los profesionales de la salud. En Barcelona, Grego García de Amaranto Joyas es una de las 'hand keepers' responsables de recibir las piezas ultimadas y guardarlas hasta el momento del envío.
La joyera barcelonesa Trinidad Contreras también ha participado en el proyecto 'Hand Medal' y se muestra orgullosa de la unión entre los profesionales del sector. Sin embargo, también admite que la iniciativa solamente ha tenido repercusión entre los compañeros de oficio. "En el mundo de las joyas ha tenido mucho éxito, pero no ha ido más allá, a los ciudadanos", afirma Contreras.
¿Y una vez llega a los sanitarios?
Después de un largo viaje, los últimos en recibir la medalla son los grandes homenajeados de la iniciativa: los sanitarios. Pero esto no termina aquí, la gran sorpresa es la posibilidad de rastrear e identificar el diseñador de la joya, facilitando una relación más próxima entre profesionales.
Se trata de un proyecto muy ambicioso que requiere la cooperación de muchas personas para poder sacarlo adelante. Pero parte de una misma base, el reconocimiento a todos los sanitarios que han estado en primera fila y han luchado incansablemente para salvar vidas.