[title]
Pan de mantequilla, de cereales, de aceite de oliva y centeno... en este horno de Barcelona podréis encontrar casi una veintena de tipos de panes diferentes para todos los gustos. Con sus emblemáticos hornos de leña hechos a medida y una decoración de madera clara, Baluard Barceloneta se ha hecho un rincón en el universo del pan de Barcelona. Desde su nacimiento en 2007 en un pequeño establecimiento en la Barceloneta, en la calle Baluard 28, el que se ha convertido en uno de los mejores hornos de la ciudad ha inaugurado su noveno establecimiento en Barcelona.
Baluard Barceloneta ha abierto un nuevo obrador en la calle Torrent de l'Olla 142, en Gràcia, donde podréis encontrar todos sus panes de panadería de toda la vida –hechos con técnica actual, claro– con la defensa de la cultura de la harina, la levadura y el tiempo repuesto por bandera. Si sois más golosos, también encontraréis una gran variedad de dulces como las berlinas de chocolate blanco y frambuesa, pasteles como el de chocolate y toffee y los 'muffins' de chocolate, zanahoria, y los naturales con chocolate negro.
Con la nueva apertura, Baluard Barceloneta ya tiene nueve obradores en toda la ciudad: en la calle Baluard 28 en la Barceloneta, que fue el primero; en la calle Mariano Agulló, 52; en la calle Pau Claris, 188; en la calle Provença, 279, dentro del Hotel Praktik Bakery; en la calle Muntaner, 363; en la calle Valencia, 246; en la Calle Baluard, 42; en la calle Casanova, 178; y el nuevo establecimiento en Gràcia.
Cuatro generaciones de panaderos
En 1892, el abuelo de Anna Bellsolà, Pere Bellsolà, fundó el horno Bellsolà en la plaza del Gra de Girona, donde trabajaba con el trigo que él mismo sembraba. Cuatro generaciones después, Anna Bellsolà heredó el amor por la profesión e inauguró Baluard, un establecimiento donde conservó la tradición del horno de leña y que se ha convertido en un elemento esencial en cada nueva apertura. Con los años, Baluard creció e inauguró obradores por toda la ciudad, uno de ellos situado en el Hotel Praktik Bakery, el primer hotel-horno del mundo.
La variedad y calidades de sus panes y otros productos no solo son reconocidos por los clientes del horno, sino que también han sido merecedores de premios: como el de la Mejor profesional del año de la Academia Catalana de Gastronomía al año 2010, el Premio a la Joven empresaria de horno del Gremio de panaderos en 2011 y el Premio a la Innovación de FIDEM, la Fundación Internacional de la Mujer Emprendedora.