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¿Cuánto vale un buen gintónic? De siete euros no baja, en el mejor de los casos. Pues Corpen, una destilería de ginebra artesanal en el corazón de Poblenou, os hace una oferta muy especial: por diez euros tienes una visita a la destilería, una cata de ginebras y un buen cóctel.
Este es un proyecto seductor y de alma ultralocal: escondido en el fondo de una nave industrial de la calle Pujades, Corpen es el proyecto de Brian Burgess (ex-marine norteamericano). Burgess conoció a su socio Pablo Barrera en un máster de gestión de diseño de cocina, que se acabó centrando en evitar el desperdicio de comida. Ambos, apasionados de la cerveza artesana, decidieron aplicar el modelo de la microcervecería a la ginebra: hola, microdestilería.
Después de siete años en la marina de Estados Unidos, Burgess bautizó la marca como Corpen "porque es una bandera que significa un cambio de rumbo, y que preside la destilería". Y la experiencia tiene mucha gracia: se trata de una visita guiada de 90 minutos donde te explican en profundidad los tipos de ginebra, los métodos de destilación, y finaliza con una cata de ginebras y un cóctel en su barra.
¿Qué diferencia la ginebra Corpen de las marcas industriales? "La nuestra tiene pocos botánicos. Cuatro. Hay ginebras que llegan a tener incluso cuarenta. Pero preferimos centrarnos en poca variedad y mucha cantidad. La nuestra lleva el doble de cantidad de botánicos que una industrial", explica Burgess. Y servidor no tiene ni idea de ginebra, pero cuando prueba su Llevant -todas las que hagan tendrán nombres de viento catalán- percibe claramente los elementos que lleva, aparte del enebro: piel de naranja, pimienta negra y eucaliptos. "Nos interesan los sabores puros, y que cuando prepares un gintónic no se pierdan". Buenísima y artesana: alcohol, agua y botánicos infusionados, y nada más.
El otro puntal de este bonito proyecto es la sostenibilidad: no venden ningún elemento de plástico, todo es vidrio reciclado y los tapones son de corcho. Y les obsesiona llegar al residuo cero en su producción. "Después de destilar, convertimos los botánicos del alambique en bitter para coctelería. Por más que se sepa, es de locos: la cuarta parte de la comida del planeta se va a la basura", se lamenta Burguess.
Corpen. Pujades, 74. Local 6. T. 936 01 31 95
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