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Aunque en los últimos años Barcelona ha vivido varios nacimientos de nuevas librerías, el sector de librero está de luto por la bajada de persianas de esta tienda. Se trata de La Garba, un símbolo de barrio porque era la última librería que quedaba en la Barceloneta. La noticia llegaba hace tres semanas a través de su cuenta de Instagram donde, a través de un comunicado titulado 'Cau el telón', explicaban que a finales de enero —concretamente este miércoles 31 de enero— se veían obligados a cerrar.
La decisión recae en la bajada de ventas y en la imposibilidad de hacer frente al alquiler de 2.500 euros mensuales, según ha explicado Barceloneta Alerta, la entidad gestora del establecimiento. De hecho, esta asociación, cuya misión es empoderar el tejido vecinal, fue quien permitió la reapertura de la librería en abril del 2019, después de que el antiguo propietario se jubilara. A través de un proyecto comunitario, que tuvo el apoyo de unos 130 vecinos con aportaciones económicas, La Garba no tuvo que cerrar ese año. Por desgracia, ahora sí.
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Hace cinco años la entidad ya era consciente de que reabrir el negocio comportaba un riesgo, pero también sabían que "La Garba representaba uno de los últimos símbolos de lo que fue la Barceloneta", manifestaban en el comunicado público. "Tarde o temprano, estaba condenada a desaparecer; como lo están los pocos comercios de toda la vida que aún resisten", añadían. Para el presidente de Barcelona Alerta, Luis Monzón, "el cierre de la librería es un paso más para que el barrio se pierda totalmente como barrio".
Librería Negra y Criminal
Años atrás, en 2015, el barrio de la Barceloneta vivió otro cierre de una emblemática librería: la Negra y Criminal. En ese momento, lo que era el templo para los amantes de la novela negra se vio obligado a bajar las persianas a causa de la caída de ventas. Paco Camarasa, fundador de la librería y comisario del festival internacional BCNegra desde sus inicios hasta el 2017, estimaba que las ventas les habían caído un 40% en los últimos tres años de actividad. En 2021, el proyecto que había empezado siendo una librería ambulante, Farenheit 451, se instaló en el local de la antigua Negra y Criminal. Sin embargo, desde abril del año pasado están instalados en el Born.