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La playa del Eixample vuelve a ser noticia unos meses antes de que llegue la temporada de verano, esta vez sin embargo, por su cierre definitivo. Si a estas alturas del año pasado se abría de nuevo el conflicto entre los usuarios de la instalación y la decisión repentina de cerrarla por parte del Ayuntamiento (finalmente se volvió a abrir después de una recogida de firmas), el verano de 2019 ya será el primer verano desde 1978 sin la piscina más céntrica de la ciudad. La decisión se toma después de un evidente y ruidoso incumplimiento de la normativa acústica, el espacio en pleno día podía llegar a superar 17 puntos los límites fijados por la ordenanza. La piscina, que no el parque, pone fin a 31 años de oasis acuático en medio del Eixample Esquerre en un momento en que justo vencía la concesión del espacio y se ha decidido no renovarla.
La alternativa, a 30 minutos de la 'playa'
El Ayuntamiento no ha querido tomar la decisión sin dar una oferta alternativa a todos los usuarios que frecuentaban la Torre de les Aigües. La alternativa es un nuevo espacio infantil de juegos de agua (circuitos acuáticos, toboganes, juegos de agua y aspersores) en el Parque de Joan Miró, ubicado en las pistas polideportivas del parque. Entre los distritos del Eixample Esquerra y Sants, estas nuevas instalaciones se dirigirán a las familias con hijos de cero a 12 años, tendrá un aforo limitado de 120 personas (unos 60 niños o niñas más un acompañante para cada uno), abrirá cada día de 10 a 20 h y no se podrá estar más de dos horas. Si ya está preparando el bañador y la toalla, tendrás que esperar hasta el día 25 de junio y deberás contar con un precio de acceso de 1,60 euros.
