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El verano ya hace unos días que se ha instalado en Barcelona y, si tenéis niños, seguro que no paráis de pensar nuevos planes para hacer con los más pequeños sin riesgo de sufrir un golpe de calor. Visitar una de las maravillosas piscinas públicas al aire libre de la ciudad es una de las opciones más populares, sin embargo, si queréis asegurar el tiro, ir a uno de los parques de la ciudad es un plan que nunca falla. Barcelona está llena de espacios infantiles para todos los gustos; con toboganes, arenales, espacios verdes y zonas de descanso. Hay de todo tipo y en todos los distritos y ahora, Sant Andreu podrá añadir otro a su lista. Las obras de la zona central de los Jardines de Massana, en el barrio del Congrés y els Indians, darán paso a una nueva área de juego infantil inclusiva con zonas de descanso y sombra para los meses más calurosos. Eso sí, para estrenarla tendréis que esperar en el próximo verano, ya que las obras acaban de empezar y tienen una duración prevista de unos ocho meses con un presupuesto de 1,5 millones de euros.
El parque se ubicará en la zona central de los jardines, que se encuentran en el interior de uno de los edificios que forma parte del grupo de viviendas Can Massana, delimitado por las calles Cardenal Tedeschini, Felip II, Espiga y Sant Pasqual Bailón. Los jardines tienen una superficie de unos 2.360 m² en forma de cruz, donde se ubican dos plazas laterales y una central, que antes era el campo de fútbol del Club Deportivo Viviendas del Congreso y ahora acogerán la nueva área infantil. Los trabajos, que empezaron el pasado lunes 8 de julio, se centrarán en potenciar los espacios de juego accesible con la eliminación de las barreras existentes para garantizar el acceso a las personas con movilidad reducida e integrar las zonas laterales de los jardines.
Con la reforma, la zona central de los Jardines de Massana quedará dividida en varios espacios de juego: cinco de ellos con pavimento de caucho y sablón compactado y zonas para columpiarse, deslizarse, trepar, balancearse y saltar; una zona con arenal destinada a actividades de experimentación; y el resto de las áreas se convertirán en espacios para experimentar, descansar y jugar libremente a la sombra. Los pequeños caminos que unen los diferentes espacios también se reformarán y transformarán en grandes parterres para crear una zona más permeable. En cuanto a los principales caminos, se aprovecharán para crear accesos a los espacios de juego y se instalarán bancos y sillas.
Sin embargo, los jardines no será el único punto de la zona que se rehabilitará, sino que el inicio de estas obras significan el primer paso para la transformación de su entorno. El pasado mes de mayo, se aprobó el Plan de Mejora Urbana para la regeneración de las viviendas del entorno de los Jardines de la Massana para mejorar la habitabilidad, un plan que instalará más de 370 balcones en varios pisos isla. Asimismo, se recuperarán y mantendrán los elementos originales de las fachadas, se mejorará el cierre de los lavaderos y terrazas cubiertas interiores y se aislará térmicamente la fachada y la cubierta de los edificios.
Barcelona, una ciudad jugable
La reforma y creación del nuevo parque infantil de Sant Andreu se incluye dentro del Plan del juego en el espacio público de Barcelona con horizonte 2030, que quiere convertir Barcelona en una ciudad jugable e inclusiva. Uno de los objetivos es incrementar las oportunidades de juego de las personas con diversidad funcional mediante mejoras de diseño de accesibilidad universal y aumentando los elementos de juego certificados como inclusivos. De 900 áreas de juego infantil, un centenar son áreas accesibles, una cifra que se pretende duplicar hacia el año 2030. En los últimos meses, se han inaugurado diversas zonas infantiles en toda la ciudad como la de 1.000 m² en el nuevo parque de las Tretze Roses en la Marina del Prat Vermell y la superárea de juego dentro de la nueva plaza del Canòdrom del barrio del Congrés y els Indians.