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Este año en curso le oí decir dos veces a Ferran Adrià: "No es porque sea mi hermano, pero en pocos lugares del mundo se come como en Enigma, y Albert ahora mismo es uno de los mejores cocineros del mundo, hace cosas que son, salvando las distancias, lo más similar que puedes encontrar ahora mismo a cómo era comer en Elbulli".
Llevar la contraria a Ferran Adrià es muy difícil, y menos cuando los galardones de The Best Chef World Awards te dan la razón: Albert Adrià (Hospitalet, 1969) ha sido considerado este miércoles el segundo mejor cocinero del mundo por 'The Best Chef Award', en una ceremonia que se ha celebrado en Dubai. El jurado del premio ha valorado que Adrià "es un icono de la experimentación culinaria, que sigue rompiendo fronteras" [...] y combina la narración de historias con una técnica innovadora, consolidando su influencia en el sector".
El triunfo todavía tiene aún más mérito, si tenemos en cuenta que esta es la primera vez que la lista abandona el formato del Top 100 y se limita a tres nombres. Le acompañan en el podio los daneses Rasmus Munk –copropietario del restaurante Alchemist de Copenhague, en el primer puesto– y en el tercer puesto el chef Eric Vildgaard, responsable del restaurante Jordnaer, también de Copenhague. Para Adrià este premio seguro que tiene un regusto de reivindicación muy especial, pues el cocinero, tras el trance de la pandemia, cerró restaurantes y redujo colaboraciones y se centró en un único restaurante propio (y desde el último verano, una heladería, Gelato Collection).
En lugar del formato Top 100, el ranking ha estrenado el sistema de Cuchillos, que premian a los chefs en función de su impacto y talento. Hay las categorías de Tres Cuchillos ("Los Mejores"), Dos Cuchillos ("Clase Mundial") y Un Cuchillo ("Excelentes"). De los 97 chefs distinguidos con los Tres Cuchillos, hay cuatro de Barcelona, además de Adrià: Javier y Sergio Torres (Cocina Hermanos Torres), Paco Méndez (Come) y Oriol Castro de Disfrutar. Y una catalana: Fina Puigdevall de Les Cols.
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